POR MARA RODRÍGUEZ MASDEFIOL
La semana pasada hablábamos de las heridas que nos dejanalgunas situaciones dolorosas que experimentamos en nuestra vida, aveces incluso desde la niñez, las cuales provocan que con eltiempo empecemos a dejar de ser nosotros mismos al buscar laaceptación de los demás. Y entonces comenzamos a vivir con unamáscara con la que sí nos acepten, con la cual siempre nosquieran. A la larga caemos en la cuenta de con la máscara nosprotegemos de cualquier situación que pueda hacernos sentir dolory que no hemos podido poner en orden.
¿DE QUÉ MÁSCARAS SE TRATA?
De las que acompañan a las heridas y el tamaño de la máscarase crea en función del tamaño de la herida.
HERIDAS MÁSCARAS
Rechazo...................... Huidizo
Abandono................... Dependiente
Humillación................. Masoquista
Traición....................... Controlador
Injusticia...................... Rígido
¿CÓMO SE VIVEN LAS HERIDAS?
RECHAZO.- De forma breve explicaremos como se viven, porejemplo, si vivo la herida del rechazo siento que no tengo derechoa existir, me creo carente de valor, diferente, raro, busco lasoledad, hacerme invisible, me cuesta trabajo comprometerme, buscomedios para huir de situaciones o personas me siento incomprendido,vivo con pánico, generalmente como poco y tiendo a consumirazúcar, alcohol o drogas, con tendencia a la anorexia, tiendo aenfermarme de alergias, diarrea hipoglucemia, y otras. La máscarade huidizo me protege del rechazo que pudiera vivir aunque yo mismome rechazo todo el tiempo. Mi cuerpo tiende a ser muy delgado yfuerte.
ABANDONO.- Otra herida que puedo vivir es la del abandono, enesta utilizo la máscara de dependiente en dónde busco atención yapoyo de los otros, me muestro indeciso para decidir o hacer lascosas, busco aprobación y consejos, vivo con tristeza, lloro conmucha frecuencia, me da miedo la soledad, soy lento para comer,suelo enfermarme de depresión, miopía, agorafobia y otras, micuerpo tiende a ser encorvado, largo, sin tono muscular y lo peorsiempre tengo miedo a que me abandonen y casualmente es lo quevivo.
HUMILLACIÓN.- En la tercera herida, la de la humillación youso mi máscara de masoquista, en donde me siento falto delibertad, mi cuerpo es rollizo, grueso, o siempre vivo poniéndomea dieta y no adelgazo; suelo sentirme indigno de merecer, meavergüenzo de mí, no me gusta que me apresuren soy lento paratodo, ignoro lo que necesito, percibo que me humillanconstantemente, tiendo a enfermarme de problemas respiratorios,anginas, tiroides.
TRAICIÓN.- La cuarta herida es la traición, en ésta yo mepongo una máscara de controlador en donde voy a buscar manipular alos demás para que hagan lo que yo quiera, todo controlo y quieroponer bajo mi orden, me molesta la pereza, quiero dar una imagen deque soy muy responsable y fuerte, digo mentiras y tiendo a seducirpara lograr lo que quiero, la gente me dice que ya están hartos demi forma de ser y suelo sufrir de gastritis, colitis y todo loacabado en “itis”. Me da miedo perder el control de mí mismo,porque vivo con estados de ánimo muy alterados y suelo vivir ygenerar estrés en las personas.
INJUSTICIA.- La última herida es la de la injusticia, en dondeyo vivo con mucha rigidez y exigencia mi vida y eso hago con losdemás soy exigente, perfeccionista, neurótico, inflexible, tiendoa no escuchar ni poner atención a mis necesidades. Tal es mi gradode exigencia que hasta he llegado a no escuchar mi cuerpo cuandoestá enfermo, porque pienso que lo importante es cumplir con loque “debe ser”, nadie debe saber lo que siento y eso me hallevado a que me perciban frío, pero ya estoy cansado y ya nodisfruto nada de lo que hago, eso es injusto. Me enfermo deagotamiento, artritis, me dan calambres, me duele el cuerpo ydemás. Esto es un esbozo de lo que son las heridas y como las vivoen mayor o menor grado.
* Tanatoterapeuta, trabajos con
pérdidas, duelos, angeloterapia.
Niños, adolescentes y adultos.
Tel: 2221-199224
