La buena costura no tiene género, tiene sentido y sensibilidad, al menos es lo que se vio ayer en la colección de Pilar Dalbat, diseñadora que se empeña en hacer prendas con carácter, sin fecha de caducidad y con apuntes sostenibles.
"Me he dejado llevar por el color de estas vidrieras, pero he querido ser fiel a la marca", explicó Dalbat, quien con esa filosofía ha ideado un abanico de prendas con líneas puras en las que impone volumen y color.
La diseñadora granadina, apostó por prendas icónicas de la marca como capas, abrigos de paño con mucho patronaje, piezas "en las que se ven las costuras" para que se contemple a primera vista ese ejercicio de virtuosismo en el corte.
Los tejidos metalizados aportaron una visión futurista y el estampado se transforma en un arcoiris de color donde el negro es un punto de referencia, el eje, que aporta serenidad y la sobriedad a la que tan acostumbrados nos tiene Dalbat, para "heroínas de hoy en día", en un intento constante de permanecer fiel a la esencia de la marca.
Aunque se trata de una propuesta ultrafemenina, Pilar Dalbat presentó varias prendas unisex sobre modelos masculinos. "No pretendo vestir a los hombres con moda femenina, son prendas verdaderamente para hombre y mujer".