Todo mexicano ha experimentado el deleite que da al paladar una tortilla recién hecha con un poco de sal o en su defecto con una buena salsa de molcajete. Pero actualmente este placer resulta aún mayor con la elaboración del maíz criollo al que se le agregan distintos sabores que van desde el betabel hasta el epazote.
El maíz es originario de la parte central de México y uno de los ingredientes primarios de nuestra alimentación, sin embargo, muy pocos saben, que existen 64 tipos de maíces criollos o nativos y la mayoría se encuentran en peligro de extinción.
Chulada Nativo, es una tortillería artesanal, la cual sólo utiliza este tipo de maíces y productos orgánicos para hacer sus tortillas.
La cara detrás de este proyecto es Andrea Flores, una joven emprendedora que cree que es importante preservar nuestros ingredientes que nos identifican como mexicanos y concientizar a la sociedad en temas de salud, lo que ahora es prioridad, ya que los maíces criollos son ricos en nutrientes y sabores que nos aportan grandes beneficios.
“Queremos que todos los mexicanos puedan comer tortillas de calidad, llenas de sabor y cargadas de nutrientes. Es muy triste ver que el maíz es el alimento más importante en México y realmente la mayoría de los mexicanos no conocemos nada acerca de su nutrición, su origen, su diversidad y no cuidamos de su calidad”, contó a Aderezo.
Andrea inició con la tortillería en plena pandemia, luego de que trabajó vendiendo comida a domicilio, donde una de sus especialidades fueron las tortillas de betabel con jengibre y de cilantro con epazote, al ver que fueron muy bien aceptadas entre sus clientes, decidió enfocarse solamente en las tortillas.
“Siempre me ha gustado el tema del maíz y las tortillas de colores, me empecé a introducir en el tema del maíz, investigar y ver como son los procesos”, explicó.
En la tortillería utilizan el proceso prehispánico de la nixtamalización para crear una tortilla de calidad y además apoyan a los agricultores mexicanos para que sigan plantando el maíz criollo y deje de estar en peligro de extinción.
Su materia prima proviene de Tlaxcala, región donde preservan estos maíces y que, de acuerdo con Flores, se hacen llamar “guardianes del maíz criollo”.
Flores explicó que uno de los beneficios del maíz morado es que contiene una gran cantidad de antioxidantes, “cada granito actúa en contra de los radicales libres, ayuda a prevenir todo tipo de trastornos y favorece la regeneración de los tejidos”.
Además compartió que una tortilla de calidad únicamente debe contener tres ingredientes: maíz, cal comestible y agua.
En esta oferta culinaria destacan las tortillas de nopal y espinaca, betabel y jengibre, chile guajillo, cilantro y epazote, flor de calabaza y hoja santa. Al día producen de 15 a 30 kilos.
