La diverticulitis es una enfermedad que no tiene nada de divertida pues, aunque su nombre suene similar y podría no causar demasiados problemas, también es posible que esta se complique para llegar incluso a una peritonitis que, como todos sabemos, es mortal si no se atiende de inmediato.
Los divertículos son una especie de bolsas a las que se llama “nidos de golondrina” -porque tienen una forma similar a estos- que se hacen en cualquier área del colon, tanto en el ascendente, como en el descendente, transverso o en la parte terminal del intestino delgado, donde se enlaza con el grueso.
Estas formaciones son más comunes en personas de 40 años o mayores y se dice que rara vez causan algún problema grave, aunque sí son molestos, explica en entrevista Eduardo López Villalobos, encargado del área de urgencias médico-quirúrgicas de la UPAEP.
DIVERTICULOSIS Y DIVERTICULITIS
La sola presencia de divertículos se conoce como diverticulosis o enfermedad diverticular, pero cuando una o más estas bolsas de inflaman, o en algunos casos pueden infectarse, esta inflamación se conoce como diverticulitis.
En el primer caso estos puede que no den ningún problema, pero cuando en estas bolsitas se alojan muchas bacterias o se acumula alimento, que a final de cuentas se va a poder también contaminar con estos microorganismos, entonces se infecta el divertículo y se inflamarlo. Podemos decir que, en términos generales, la diverticulitis es la fase aguda de la presencia de divertículos.
Quizá podrás preguntarte si tienen algo que ver con los pólipos, pero estos son bolitas en el intestino, son muy diferentes y surgen cuando un vaso se inflama, se obstruye, se une a la mucosa y esto hace que se forme la bolita, que está bien vascularizado; esta no aloja comida ni bacterias, comenta el doctor.
ES CRÓNICA
Si tenemos diverticulosis, estos “nidos de golondrina” solamente van a estar ahí y no hacemos nada al respecto, nos saldrán otros más posteriormente, entonces esta enfermedad se convierte en una situación de tipo crónico.
SÍNTOMAS
Dentro de los signos y síntomas de la diverticulitis se incluye principalmente el dolor, ese es el primero; puede ser constante y persistente durante varios días, no se quita rápido y se da a nivel de la parte inferior izquierda del abdomen, es decir, en el colon descendente, pero López insiste en que puede presentarse en cualquier parte del intestino grueso.
Otros síntomas son: náuseas y vómito, fiebre, sensibilidad abdominal, es decir, que si te tocan el abdomen te molesta mucho y también se puede presentar estreñimiento o, con menos frecuencia, diarrea, añade.
CAUSAS DE LA DIVERTICULITIS
Los divertículos se suelen desarrollar cuando hay lugares naturalmente débiles en el colon, que ceden bajo presión; esto quiere decir que el alimento está raspa y raspa una misma zona, que se va abriendo y se va haciendo la bolsita hasta que se forma el divertículo.
Esto hace que aparezcan bolsas más o menos del tamaño de una canica, son chicas y sobresalen a través de la pared del intestino. La diverticulitis se produce cuando se desgarran los divertículos, lo que provoca la inflamación y la infección.
FACTORES DE RIESGO
La edad: el primer factor de riesgo para presentar esta enfermedad es el envejecimiento, pues la incidencia de diverticulitis aumenta con la edad; mientras más grande es el paciente es más fácil que se desarrolle, asegura López Villalobos.
Obesidad: tener un gran sobrepeso aumenta las posibilidades de desarrollar diverticulitis
Tabaquismo: es muy importante tener en cuenta que las personas que fuman son mucho más propensas a formar divertículos que quienes no lo hacen.
Falta de ejercicio: se ha comprobado que quienes no tienen actividad física tienen más tendencia a formarlos que quienes sí la hacen.
Dieta alta en grasas animales y baja en fibra: aunque esto está todavía en discusión, no se ha comprobado al 100% que esta pueda ser una causa, pero sí se puede considerar como un factor de riesgo.
Medicamentos: también algunas medicinas nos pueden provocar o hacer tendencia para formar los divertículos, principalmente los esteroides, opiáceos -que son analgésicos narcóticos muy potentes-; también analgésicos antiinflamatorios no esteroideos, como el ibuprofeno y el naproxeno.
COMPLICACIONES
El especialista comenta que, según algunas estadísticas, alrededor del 25% de las personas con diverticulitis aguda llegan a desarrollar complicaciones, entre las que se incluye un absceso que se produce cuando se acumula pus en las bolsas.
Otra puede ser una obstrucción intestinal, por el tejido cicatrizado de los mismos divertículos; además pueden surgir fístulas, que dan bastante “guerra” y pueden formarse cuando la pus hace caminos entre los diferentes tejidos del organismo y se llega a conectar de un intestino a otro, por ejemplo.
Una cuarta complicación puede ser la peritonitis, que es más peligrosa, porque si se llega a perforar el intestino por este divertículo desgarrado, se puede provocar esta que es una urgencia real médica y puede causar la muerte, advierte.
CÓMO PREVENIR LA DIVERTICULITIS
Para evitar sufrir de la enfermedad diverticular, Eduardo López Villalobos, especialista en urgencias de la UPAEP, recomienda hacer ejercicio con regularidad, porque este favorece el funcionamiento normal del intestino y reduce la presión dentro del colon, que es lo más importante, entonces dificulta que se formen los divertículos.
Además, debemos comer mucha fibra, porque este tipo de alimentación disminuye el riesgo de la diverticulitis; puedo tener divertículos; las semillas y nueces no están asociadas con el desarrollo de diverticulitis, esto es muy importante saberlo, indica el médico.
Tomar mucha agua también es muy importante, porque mantener hidratado el intestino para que no esté reseco y no se favorezca la formación de los divertículos. Por último, es necesario evitar fumar, porque como ya dijimos, el tabaquismo es una de las causas principales para el desarrollo de divertículos.
LA SEÑAL PARA VER AL MÉDICO
El principal signo que nos indica que debemos acudir a consulta con un doctor es el dolor abdominal. Si ya tenemos más de 40 años, tenemos algunos de estos factores predisponentes y tenemos un malestar muy molesto en la zona del colon y aunque tomemos analgésicos no se nos quita, no hay que esperarse porque podríamos tener divertículos, aconseja.
TRATAMIENTO
Se dice que la diverticulitis leve se debe tratar principalmente con reposo, plan de alimentación sana y generalmente con antibióticos cuando se inflaman. En ocasiones puede llegar a necesitar cirugía, es decir, que operen esos divertículos.
Cuando se requiere una operación, probablemente se tenga que hacer una resección del intestino en la zona donde se encuentran los divertículos, para evitar que esté en peligro la vida del paciente, informa el entrevistado.
También es posible que el gastroenterólogo haga una colonoscopía y durante esta puede cauterizar los divertículos, incluso antes de que se lleguen a inflamar para evitar problemas, principalmente los que tienen mayor riesgo.