La lumbalgia es el nombre que se le da al dolor en la parte baja de la espalda. Es uno de los dolores más frecuentes y una de las principales causas de ausentismo laboral. La lumbalgia puede ser desde leve hasta prácticamente incapacitante.
SUS CAUSAS
Tiene distintas causas, como problemas óseos, articulares, daños a los nervios, y puede incluso hasta estar relacionada con la aparición de tumores malignos, como el de próstata, pulmón y mama. Cualquier persona puede padecer lumbalgia, pero es más probable en personas mayores y los que realizan esfuerzos físicos.
CÓMO PREVENIRLA
La actividad física previene la aparición de la lumbalgia y disminuye notablemente el dolor cuando aparece. Se recomienda el siguiente ejercicio: acostados en el piso con las rodillas flexionadas y los pies en el suelo, tomar una rodilla con ambas manos y llevarla hacia el pecho, manteniendo la posición 5 a 10 segundos. Alternar repitiendo 5 a 10 veces con cada pierna.
Variante: trabajar con las dos rodillas juntas.
Otro ejercicio: acostados en el piso, con las rodillas flexionadas y los pies en el suelo. Colocar las manos bajo la cabeza, aplastar la espalda contra el suelo manteniendo 5 a 10 segundos y relajar. Repetir 10 veces.
ADOPTAR LAS POSTURAS CORRECTAS:
De pie: mantener la cabeza erguida y el estómago hacia adentro. Si debes permanecer de pie mucho tiempo, consigue un taburete pequeño sobre el que puedas descansar de un pie a la vez.
Sentados: utiliza sillas con soporte lumbar o coloca una toalla pequeña enrollada en el asiento que soporte tu área lumbar.
Acostados: utiliza un colchón intermedio. La superficie debe ser plana y firme pero no dura.
Levanta adecuadamente objetos pesados: No doblar la cintura, sino agacharse y hacer fuerza con las rodillas para levantarse. Mantener el objeto pesado cerca del cuerpo. Si debes hacer esto con frecuencia utiliza cinturones con soporte lumbar.
La técnica adecuada para levantar objetos es utilizar los músculos de las piernas, no los de la espalda.
CONSEJOS
Cambia el estilo de vida. Los cambios en el estilo de vida y alimentación pueden ayudar a prevenir el lumbago: alcanzar y mantener el peso adecuado con dieta y ejercicio, para evitar presiones y tensión sobre la columna vertebral, articulaciones y músculos de las zonas lumbar y pélvica.
Evitar los zapatos de tacón alto, que obligan a inclinar el cuerpo hacia adelante para mantener el equilibrio.
No fumar. La nicotina y toxinas del cigarrillo pueden causar osteoporosis y otros problemas óseos que conducen al lumbago.
PRESTA ATENCIÓN A LOS SÍNTOMAS
Si aparecen los más leves síntomas de lumbago te recomendamos consultar con tu médico para evitar males mayores.
Pide una cita con tu doctor si:
- El dolor en la espalda baja no mejora en 6 semanas tratado con analgésicos.
- Sientes entumecimiento o debilidad en las piernas.
- Tienes dificultades para controlar las evacuaciones o la orina.
- No encuentras una posición cómoda sentado o acostado en el episodio de dolor.
* Médico cirujano y senólogo
Titular de Cirugía Ambulatoria IMSS UMAA.
Máster en Patología Mamaria y Senología.
Teléfono: 2-46-16-62