Hola queridos lectores, aquí como cada domingo su servidor, siempre con el favor de Dios pasando lista de presente con un artículo más, esperando sea de su agrado. En esta ocasión les voy a narrar un recorrido muy especial, no tanto por la polémica que ha desatado, sino por el contexto que en sí encierra este tema: la famosa casona de la avenida Juárez y la 17 sur, y la brillante labor de Casa Besign.
¿Qué es casa Besign?, es una agrupación de empresarios y desarrolladores de la decoración, cuyo fin es darse a conocer a traves de exposiciones en todo el país, representa estilos sobre todo europeos, italianos, franceses, alemanes, españoles, etcétera; todo lo que sea estilo europeo ellos lo representan, y para ello se apoyan utilizando casas antiguas y sobre todo simbólicas entre la sociedad, en este caso, la sociedad poblana.
Este es el segundo año que se presenta en nuestra ciudad, el año pasado ustedes recordarán la nota que publiqué acerca de su labor de decorado en la famosa casa Arroyo, en la Avenida Reforma 915; hoy utilizaron como escaparate para su trabajo de decoración la famosa mansión de la avenida Juárez esquina con la 17 sur, bellísima construcción de estilo francés.
Casa Besign no es una empresa restauradora, pide en comodato por un mes casonas, las cuales a traves de sus asociados decoran habitación por habitación, respetando la arquitectura del inmueble. Al final de su presentación, le entregan al dueño de la mansión su casa intacta y como un agregado, una muy ligera remodelación sin el menor daño posible a su estado original.
Comencemos el recorrido: la primera imagen que nos recibe es en la pared del fondo, una enorme reproducción de un avión biplano STEERMAN, de los años treinta, un avión de entrenamiento idéntico al que se encuentra en el patio del museo del ejército y fuerza aérea, a unos pasos de esta mansión, pasamos a traves de una clásica escalinata afrancesada al vestíbulo de la casa, aquí las edecanes de la empresa nos indican que cada asociado de la empresa tomó una sola habitación y la decoró según el estilo de su diseñador.
Las habitaciones de la planta baja, constan de despacho, comedor, la pequeña cocina, balcones hacia el patio, pero la rúbrica principal es la enorme sala bellamente decorada con un estilo clásico modernista, bueno, todas están excelentemente decoradas y amuebladas. Les recuerdo, no es una restauración de la casa original a su clásico estilo porfiriano, es la adaptación de esta al siglo XXI, pero conservando su clase, su elegancia y status de mansión.
Para acceder al segundo piso, nos conducimos a traves de una bella escalera, totalmente de madera, la cual conserva su aroma natural; nos recibe un pasillo con comunicación a las habitaciones de la familia: la coqueta recámara femenina, una estancia intermedia con acceso al balcón que ha sido la rúbrica de esta casa sobre la acera de la avenida Juárez, la habitación juvenil masculina, la recamara principal, y desde luego, el clásico baño para la familia, decorado con un bellísimo vitral, mostrando una sirena en brillantes colores.
Cada habitación nos muestra lo último en tendencia de decoración de interiores: sonido envolvente, iluminación controlada digitalmente, mobiliario vanguardista, pero algo increíble, perfectamente adaptado al diseño afrancesado de la mansión.
En la azotea de la casa, lugar donde están las que fueron las habitaciones de la servidumbre, se montó un bellísimo jardín con sillería, patrocinado por varias empresas restauranteras, donde al final del recorrido podemos disfrutar de una exquisita y muy helada copa de vino, acompañado de un excelente plato de quesos, lugar más que idóneo para ponernos al tanto con los amigos sobre los temas sociales del momento.
Y para terminar, del cielo bajamos a la tierra, o mejor dicho, bajo tierra: pasamos al sótano, donde podemos admirar el estado interior tan perfectamente conservado de la casona, y para cerrar con broche de oro, qué mejor que degustar un excelente platillo en su restaurante instalado ex profeso.
Todo esto y más nos ofrece Casa Besign en su muestra de decoración de este 2019, al momento de publicar esta nota quedarán solamente dos días para disfrutar este bello lugar. Vale la pena, se los aseguro.
Se despide de ustedes su amigo El Barón Rojo, agradezco el favor de su atención y los invito a contactarme para cualquier comentario o sugerencia. Hasta la próxima.
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