Desde este lunes 28 de octubre y hasta el domingo 3 de noviembre las calles de Huaquechula se llenarán de color y tradición para recordar a los seres queridos que han fallecido. Con sus monumentales altares, costumbres ancestrales y calles colmadas de folclor el municipio se prepara para recibir a sus visitantes.
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Este año se podrán visitar 26 casas diferentes, de las cuales tres tendrán su apertura el 28 de octubre, una el 31 y el resto el primero de noviembre. Desde inicios de septiembre se han estado elaborando los preparativos y los adornos que serán utilizados durante las festividades, todo esto ha sido realizado gracias a la colaboración de los habitantes y trabajadores del ayuntamiento.
Aquí en el municipio de Huaquechula principalmente los trabajadores del ayuntamiento son los que colaboran, junto con el equipo de (la dirección de) Turismo, para que todas las atracciones estén bonitas para recibir a todos los turistas que nos vienen a visitar indicó Perla Itzel Dolores, auxiliar de Turismo y Cultura.
Este año Huaquechula espera recibir alrededor de 14 mil personas. Perla Itzel explicó que reciben más gente de la Ciudad de México y de Puebla capital, pero también visitantes del extranjero, principalmente de Colombia y Perú, así como otro tanto de Europa, sobre todo de Francia.
Esta época del año representa un gasto muy fuerte para el municipio, ya que se invierte en el material, las pinturas y madera, para hacer las ofrendas; papel picado, para decorar las calles; flor de cempasúchil, que este años contará con más de siete mil plantas que serán utilizadas para adornar el centro histórico; la tela de satín, que son alrededor de 10 a 12 rollos de satín blanco los que se emplearán, más los colores extras que se utilizan.
Además de esto, la funcionaria municipal asegura que el municipio le otorga una pequeña ayuda monetaria a las familias que presentan su altar al público que acude a la celebración durante estas fechas:
Además de todo el material que ocupan para realizar este evento se les da una parte a todas las familias de finados, pero solo de la cabecera municipal. Este año son (apoyos) para 19 familias que vinieron a dejar su documentación a quienes se les apoya con una porción para que vayan solventado ellos parte de los gastos que tienen
Respeto a las tradiciones
“No es un atractivo turístico, es una tradición viva que Huaquechula todavía tiene”, afirmó la servidora pública del ayuntamiento de Huaquechula.
El municipio ha optado por poner tres altares que se podrán visitar en cualquier momento del año para que los conozcan los visitantes. Por otra parte los altares levantados por las familias, que se pueden visitar en sus casas, tienen que ser tratados con un respeto singular debido a la tradición que están manteniendo.
El año pasado el gobierno municipal tuvo que implementar el “Reglamento al turista”, el cual estipula las normas que la comunidad ha impuesto para que quienes visitan la zona en esta temporada del año entiendan que las ofrendas son una tradición viva y no un atractivo turístico.
Quienes buscan disfrutar de esta tradición deben de respetar el ritual que las familias realizan a la hora de la “apertura” de las ofrendas.
Es un momento muy íntimo, porque muchas veces las heridas de haber perdido un ser querido aún no están lo suficientemente sanadas, entonces hay que tener parte de respeto mientras la familia termina de recibir a su ánima abundó.
Los turistas deben pedir permiso a la familia que reside en la casa en cuestión para estar seguros sobre si se puede entrar y conocer el altar monumental, además de que es debido presentar un obsequio a las personas que crearon la ofrenda, ya sea una veladora, cera o una ayuda monetaria. En agradecimiento la familia generalmente ofrecerá un vaso de agua, chocolate caliente, pan o inclusive un plato de mole.
Monumentales ofrendas
Los altares dedicados a los difuntos son la tradición distintiva del municipio de Huaquechula. Cada año las familias se preparan para recibir a sus difuntos en sus casas con estas monumentales estructuras.
Ubicada sobre Avenida de la Juventud, casa 404, la familia de Rubí Chipahua Martínez recibirá a su tío, Leonides Rubín Morales, quien era Sargento Segundo de Caballería dentro del Ejército Mexicano en el estado de Veracruz.
El altar de la familia Chipahua se va a abrir a las dos de la tarde del día 31 de octubre, cuando hacen el rito de recibir a su ánima. Como familia permitirán que ingresen las personas, pero primero quieren que se les otorguen unos momentos de intimidad para llevar su duelo. Posteriormente permanecerá abierto para ser visitado el primero y dos de noviembre
“Estamos ubicados en una calle principal y es una de las primeras ofrendas que llegan a ver, entonces nosotros sí les hemos dicho que claro que les vamos a permitir que entren, ‘pero déjennos, en el momento que les indiquemos que pueden ingresar al domicilio háganlo’, y la gente ha respetado y eso es algo que agradecemos”, señaló Chipahua Martínez.
El altar del difunto sargento se compone de distintos símbolos que tienen un significado diferente. Por ejemplo, los tres niveles que simbolizan lo terrenal, la unión del cielo y la tierra y el cielo; los ángeles, que son los custodios del alma; los llorones, figuras de barro en forma de niños que representan a los dolientes; el copal, que atrae al ánima; el espejo, que indica que la persona ya no está presente, entre otros.
La elaboración de estas monumentales estructuras significa un gasto grande para las familias de Huaquechula, principalmente porque la tradición pide que el altar sea decorado con tela de satín blanco. Esto, junto con el resto de los elementos, hace que el gasto hacienda a 20 mil pesos.
Hace seis años hicimos un altar que fue para mi abuelita y mi tía y fueron como 120 metros de tela de satín, aunado a la elaboración de la comida para ofrecerle a los visitantes pues ya es un gasto muy elevado recordó Chipahua.
Figuras de alfeñique
Margarita Chapero Rivera es una de las principales artesanas de la región. Ella se encarga de elaborar figuras de alfeñique (artesanías elaboradas con azúcar), que están presentes en todos los altares del municipio, las principales figuras que Chapero elabora son borregos, patos y canastas de flores, todos realizados puramente con azúcar y colorante vegetal.
Chapero comenzó desde muy joven observando cómo la tía hermana de su papá elaboraba estas figuras, hasta que finalmente cuando ella cumplió los 16 años es que su familiar comenzó a enseñarle a elaborar el alfeñique que realiza hasta la actualidad. Tal es la fama del arte de doña Chapero que medios de comunicación internacionales se han contactado con ella para poder documentar su tradición.
El proceso es completamente artesanal y Chapero se vale de materiales sencillos para la realización de sus artesanías. Ella no ocupa más que un anafre con carbón, un pocillo de cobre, un comal de barro húmedo, azúcar y limón.
El proceso comienza poniendo agua a hervir y agregando el azúcar, una vez que alcanza una textura similar a la miel se le ponen 20 gotas de limón, para que sea más fácil de manipular la mezcla y se revuelve para que obtenga la consistencia ideal. Posteriormente es agregado al comal de barro donde se dobla el azúcar caliente sobre sí misma para que alcance un color blanco pálido. Una vez terminado esto solo queda darle la forma deseada.
Cuatro generaciones de tradición
Rossy Sorián es quien elabora más de mil 500 piezas de pan que decoran los monumentales altares y son disfrutados por la gente durante las festividades de Día de Muertos en Huaquechula. Ella es parte de una larga tradición familiar de panaderos, siendo de la cuarta generación.
La receta que sigue actualmente para la elaboración del pan es la misma que han utilizado sus tatarabuelos cuando comenzaron a realizar esta actividad, además de que todas las piezas son hechas artesanalmente en horno de leña.
Sorián elabora cuatro tipos de pan para estas épocas, cada uno de tres tamaños diferentes: hojaldras, muertitos, pan blanco y rosquetes, que es un pan que asemeja a la cara y la boca de un difunto.
Tal es el gusto de la gente de Huaquechula y sus alrededores por el pan de la señora Sorián que durante estas festividades ella exporta su pan a sus paisanos que se encuentran viviendo en Nueva York.
Otras actividades
Además de poder conocer los hermosos altares, quienes visiten el municipio podrán ser parte del resto de los talleres que el ayuntamiento ha preparado para esta temporada de Día de Muertos.
Este año se impartirán tres talleres diferentes al público en general. Habrá cursos exprés de chocolate, pintura y barro policromado. Estos estarán disponibles desde las 11 de la mañana y terminarán hasta la hora que el artesano pueda acompañarlos.
En el taller de chocolate los visitantes elaborarán una tablilla del tradicional de Huaquechula. En el de pintura elaborarán una catrina, cochinito o una maceta. Y en el de barro policromado replicarán el material que usan los artesanos locales para crear los sahumerios y candeleros.
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Estos talleres sí van a tener un costo, porque justo se les da la apertura a los artesanos, pero lo que se les pague va a ser la ganancia de su día (...) cada artesano va a poner su precio, es un precio razonable y accesible para todas las personas finalizó Perla Itzel Dolores.