Existen grandes equipos que han tardado mucho en ser campeones, pienso ahora en el poderoso América, liderando la historia con 13 ligas, pero que tuvo una gran sequía que duró 13 años, sin contar que ese partido del 2002, frente a su hermano menor, fue muy sospechoso.
Hace unos días el equipo cementero logró alcanzar una ansiada liga que parecía imposible. Después de 24 años nuevamente se alzó con la corona dejando atrás una sequía que quizá sea culpa de “Billy Álvarez”, sea como sea, al final los celestes pudieron ser campeones.
Los legendarios Dodgers tuvieron que esperar 32 años para nuevamente alzarse con una Serie Mundial, lapso demasiado grande para una franquicia que quizá sea la más popular de la Liga Nacional. Ahí también parecía que había algo raro y que impedía a los angelinos alcanzar el título, pero al fin lo consiguieron hace un año.
Estos dos hechos dan la pauta para que otras grandes instituciones puedan nuevamente tener los laureles en su frente. Por historia, fama y afición tenemos a varios equipos que les urge ganar algo.
Empecemos por la franquicia más valiosa del mundo en términos monetarios: Vaqueros de Dallas, cuyo aparato mercadológico, instalaciones, estadio y equipo en sí superan a cualquier otra marca de cualquier otro deporte, es más, ni el Real Madrid puede superar a los texanos, es por eso que llega la duda de por qué no han podido ganar un Super Tazón, pese a todo ese respaldo material y humano.
Otro caso notable es el de la Selección Argentina, un cuadro donde han militado grandes jugadores de clase mundial que han ganado múltiples títulos con sus clubes, incluyendo al supuesto número uno del mundo, Leonel Messi, quien con la albiceleste ha fracasado en diversos aspectos, incluyendo el alcanzar un título.
Recordemos que los actualmente dirigidos por Lionel Scaloni no ganan una competencia oficial desde 1993, cuando derrotaron, en la final, precisamente a la sorprendente Selección Mexicana que asistió en calidad de invitada ese año. Después de ahí, a los bicampeones del mundo se les han ido campeonatos de Copa Confederaciones, América y hasta del Mundo, a veces teniendo a minutos el título, como contra Brasil en 2004; o con yerros imperdonables, como el del “Pipita” Higuaín, frente a los alemanes en el Mundial de 2014, o el penal fallado por Messi frente a Chile.
Argentina sigue produciendo grandes jugadores y tiene un estilo propio de futbol que agrada al mundo, eso es innegable, es más, se le ha puesto como favorito en muchas competencias, pero tiene 28 años que simplemente no gana nada, así es que esto se ha tornado como una maldición, la cual quizá surja de la corrupción de su federación. Parece que no bastó que la “dictadura” de Julio Grondona al frente de la Asociación de Futbol Argentino haya terminado, la corrupción y problemas internos han relegado al gran futbol argentino al fracaso, así como quizá sucedió con el país entero, que pasó de ser una potencia a un país con muchas carencias, todo debido a los malos manejos. Esperemos que la Copa América pueda ser la buena para los rioplatenses, además de que sería en el territorio del acérrimo rival. La mesa está puesta y esperemos que ahora sí la “Pulga” pueda demostrar lo que algunos dicen de él: que es el mejor de la historia. Hasta la próxima.
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