Atrás, en la línea de zaga, La Franja apostó para este semestre por la experiencia con los fichajes de Antony Silva (36), Juan Pablo Segovia (31) y Lucas Maia (27); pero al frente confío sus goles al desparpajo propio de la juventud de Santiago Ormeño y el ariete Guillermo Martínez, goleador recién llegado de la Liga de Expansión, donde marcó siete dianas con el Celaya.
El artillero nacido futbolísticamente en las filas del Pachuca tratará de confirmarse de una vez por todas en el balompié de Primera con el Puebla tras un paso gris con anterioridad con los Tuzos y las Chivas Rayadas del Guadalajara.
Si bien Martínez hoy no es la primera opción en el eje del ataque blanquiazul, el delantero celayense se mira en el espejo de Santiago Ormeño, a quien en poco tiempo le ha aprendido sobre la “entrega, el ímpetu, el sacrificio y la perseverancia”. Pues Ormeño, hasta hace un semestre era prácticamente un desconocido en el máximo circuito, pero un torneo después y a sus 26 años, se convirtió en la revelación de la competencia tras anotar siete dianas para erigirse como el segundo mejor goleador mexicano de la Liga MX.
“Creo que en Pachuca y Chivas por momentos me ganó la juventud. Pero tras mi paso por Celaya aprendí muchas cosas que espero me sirvan acá, pues estoy contento de volver a Primera División y con el deseo de quedarme”, apuntó el delantero.
“Hay gente muy joven acá, pero con experiencia, gente de la que aprendo mucho y contra quien debo de competir de igual a igual para ganarme un lugar”, agregó.
El ariete confía en contar con minutos mañana en el Azteca, donde los espera un equipo con “alto grado de dificultad” como lo es Cruz Azul. Pero La Franja, a decir del delantero, “estará preparada, jugará con tranquilidad dada la unión del grupo, que está listo para darlo todo por el otro”, remató.
- Guillermo Martínez vuelve este semestre a Puebla tras defender los colores de Lobos BUAP en el 2016