Los 27 minutos disputados contra Panamá el viernes pasado como parte de la fecha FIFA le supieron a gloria a Michaell Chirinos, pues se trataron de sus primeros con la selección de Honduras después de no contar para otros técnicos en otros procesos.
El catracho le dio crédito de su reciente éxito con la “H” a su participación dentro de la Liga MX, para él “una de las mejores ligas”, y la cual le ha ayudado “a crecer futbolísticamente”.
Clave en el crecimiento experimentado como jugador desde su llegada a México en agosto pasado ha sido la confianza del entrenador lobezno Juan Francisco Palencia, a quien agradeció “por los consejos” desde entonces.
Chirinos vive su primera experiencia fuera del futbol de su país en México y con La Manada de los Lobos de la BUAP.
“(El futbol mexicano) es muy exigente y allá hay que acoplarse a lo que sea”, indicó.
Sobre su contrato, precisó le quedan seis meses más en Lobos a préstamo, los cuales cumplirá con el deseo de convencer a la dirigencia para llevarla a comprar su carta al Olimpia de su país, club dueño de sus derechos.
Aunque antes buscará con Lobos un triunfo en el cierre del torneo contra los Diablos Rojos del Toluca, rival a quien enfrentarán la próxima semana en el Universitario de la BUAP.
“Estoy a préstamo, todavía me falta y este domingo jugamos contra Toluca en la última fecha y después tengo seis más con ellos. Confío en Dios poderme quedar y sino esperar una mejor opción”.
GOLES ha convertido con la playera universitaria.
AÑO atrás recibía su primer llamado a la selección absoluta de Honduras.