Con 36 años de edad, siete de ellos lanzando en la mejor pelota del mundo con Texas y Kansas City, el lanzador derecho veracruzano Luis Alonso Mendoza se convirtó en el nuevo refuerzo de lujo de los Pericos de Puebla, de cara a la temporada 2020 que abren el 7 de abril visitando a los Toros de Tijuana.
Mendoza vendrá a convertirse en el as del pitcheo de una rotación que padeció el año pasado y donde hará mancuerna con el experimentado Mauricio Lara, que curiosamente al igual que Mendoza tuvo formación en Estados Unidos con los Medias Rojas de Boston y en el beisbol infantil en la Liga Maya de la ciudad de México.
El pitcher originario del puerto de Veracruz fue firmado a los 18 años por la Organización de las Medias Rojas de Boston en el año 2002. Con Red Sox estuvo en par de etapas y entre ellas también formó parte también de los Padres de San Diego. Para la campaña del 2006, los Rangers de Texas se hicieron de sus servicios y fue a partir el despunte de Mendoza.
Sus excelentes actuaciones en sucursales lo llevaron a debutar con los Rangers de Texas en la Gran Carpa en ese mismo 2007, un 8 de septiembre ante los Atléticos de Oakland, y lo hizo de manera fenomenal al colgar par de argollas, esto bajo la tutela de Ron Washington.
Se mantuvo con Texas hasta el 2010 y para la campaña del 2011 emigró a los Reales de Kansas City. Al igual que con Rangers mostró su valía en Clase AAA y en la campaña del 2011 tuvo foja de 12-5 con 2.18 de efectividad con la novena de Omaha Storm Chasers, de hecho tuvo la distinción de pitcher del año en la Pacific Coast League. Con ese gran 2011 se ganó la oportunidad de ser parte de la rotación abridora de los Reales en el 2012, y no decepcionó al tener 25 aperturas y lanzar 166 entradas, fue uno de los tres principales brazos de Ned Yost, junto con Bruce Chen y Luke Hochevar.
Para el 2014 inició su aventura en el beisbol nipón con la novena de Hokkaido Nippon Ham Fighters, destacando con grandes actuaciones, y siendo pieza fundamental del campeonato obtenido por este equipo en el año 2016, jugando a lado del ahora estrella de los Angels, Shohei Ohtani. Con los Nippon Ham se mantuvo hasta mediados de la campaña 2017, ese año lo culminó con Hashin Tigers.
En Liga Mexicana ha militado con par de novenas, los Diablos Rojos del México y los Leones de Yucatán.
En el invierno ha jugado con Yaquis de Ciudad Obregón y con los Naranjeros de Hermosillo, con los primeros conquistó la Serie del Caribe del 2013, y de hecho fue nombrado Jugador Más Valioso al totalizar con record de 2-0 y una inexistente efectividad de 0.00.
Entre otras cosas a destacar, ha jugado con la Selección Mexicana en los Clásicos Mundiales de Beisbol de los años 2013 y 2017; ha tirado dos juegos sin hit en Clase AAA, el primero con Oklahoma City RedHawks el 14 de agosto del 2009, y el segundo con Omaha Storm Chasers el 18 de julio del 2011.
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