La ausencia de Christian Tabó obligaba a replantear a Puebla en Tijuana las vías para llegar al gol, más por encontrarse con unos Xolos en necesidad. En cambio, los blanquiazules se apegaron al plan original (defender) y acabaron cayendo 1-0 para comprometer su presencia dentro del grupo de los calificados.

En cuanto a la porcentual, menos mal San Luis cayó 3-1 con Cruz Azul; aunque Xolos ya recortó distancia en esa carrera por evitar caer entre los últimos tres puestos.

La Franja dio la impresión de perder no sólo el partido, también el rumbo defensivo en la frontera. Los de Reynoso se guarecieron amontonando gente y rompiendo la pelota a cualquier lado, jugando sin criterio.

Si Xolos lo ganó, es porque aprovechó las grietas en el muro poblano, flojo a la hora de marcar o cambiar las coberturas.

Con un rival totalmente tirado atrás, Tijuana apostó por el toque y el movimiento para abrir los espacios, encontrándose con el primero en los botines de Brayan Angulo... sí, el de Tijuana; el del Puebla ni sus luces porque estaba amarrado en su propia cancha.

El delantero de Xolos, convirtiendo su segundo gol en el Guard1anes 2020, simplemente empujó un rebote otorgado por Nicolás Vikonis para abrochar la victoria con el mínimo esfuerzo, frase nunca antes mejor utilizada.

Tras el gol y posterior reanudación, Xolos le mostró a Puebla cómo jugar a defenderse: replegando cuando el rival se le venía encima y desdoblando a toda velocidad tras desarmarlo.

Si bien Juan Reynoso respondió, dio la impresión de hacerlo tarde, inclusive con limitantes.

El domingo en la frontera necesitaba de un hombre con imaginación, toque y descaro como “Osvaldito” Martínez. Pero del paraguayo nada, ni a la banca, como si la tierra se lo hubiera tragado.

Reynoso debía de jugársela con el arsenal a disposición: Alan Acosta (desde mucho sin ritmo o deprimido) por el joven Israel Reyes; Daniel (el desconocido) Aguilar por Pablo González; y tras ellos... a amontonar gente al frente con Eduardo Herrera y Bernardo Cuesta, para ver si uno de los dos la “cascaba”.

Pero para gozar de una, se necesita de futbol y en ese renglón La Franja está perdido.

Lo malo es que para la próxima jornada no estará su mejor hombre, Nicolás Vikonis. El charrúa se fue a las duchas tras quedar como último hombre y bajar a Angulo cuando el delantero lo superaba y cantaba el 2-0.

Sin cambios, el Angulo del Puebla acabó poniéndose los guantes. Pero La Franja se desdibujó por completo y perdió a otro hombre por una nueva expulsión, Alan Acosta.

Cero y van tres, los blanquiazules parece han vuelto a su realidad tras protagonizar un arranque de ensueño.