Como un golpe terrible a la economía, por todos los empleos que genera, además de lo que mueve en todos los aspectos, desde publicidad hasta pago de impuestos, sería terminar con la fiesta taurina en Puebla, aceptaron un grupo de taurinos, en relación a la iniciativa que presentó la alcaldesa Claudia Rivera hace poco más de un mes.
Con un año sin actividad en Puebla por la pandemia del Covid-19, la empresa Don Bull que dirige los destinos de la plaza de toros El Relicario, ya respondió que en cuanto se den las condiciones volverán los toros, en clara respuesta a lo que propone la edil poblana.
CLAUDIA RIVERA Y SU PROPUESTA
En el mes de noviembre, la alcaldesa de la Angelópolis, Claudia Rivera Vivanco ofreció un foro en el cabildo donde se escucharon voces a favor de la fiesta brava como el periodista y ganadero Enrique Núñez y el representante de Tauromaquia Mexicana Pepe Saborit; posturas en contra, toda vez que la iniciativa de la Presidenta Municipal había sido prohibir este espectáculo en la ciudad capital.
Simultáneamente, regidores de distintos partidos encabezados por Luis Acosta, en reunión en otra parte de la ciudad decidieron postergar el análisis de la iniciativa de la edil poblana, puesto que consideraron que por el momento hay otras prioridades para las y los poblanos. Pero antes, se deben hacer estudios para conocer el impacto cultural, social y económico que tendría en la población una medida de esta magnitud.
MI FORMA DE VIDA: EL LOBO
Se estima que cada ocasión que abre la plaza de toros El Relicario sus puertas, se generan de manera directa más de 200 empleos, pero en forma indirecta hasta el doble.
Para Gustavo Rugeiro “El Lobo” esto es su forma de vida: “Aquí llegué a la plaza de toros El Relicario prácticamente desde que inició. Tengo más de treinta años de trabajar en ella. Soy parte de su estructura y ella es parte de mí, si la cierran definitivamente me muero.
“Cuando hay corrida, el servicio de la plaza empieza desde hacer limpieza general, comenzando por los corrales. Hay que esperar la llegada de los animales, a veces llegan en la madrugada para que no tengan tanto ruido o noten mucho movimiento; después hay que darles de comer. Deben llegar por lo menos tres días antes del festejo.
“El ruedo debe cuidase para que esté apto para el día de la corrida. Elaboramos las banderillas que llevan su tiempo, pero también las divisas, que son los listones de colores que se le ponen a los toros cuando salen al ruedo”, apunta Gustavo Rugeiro.
TRABAJADORES DEL SERVICIO DE PLAZA
“El día de la corrida, son más de 20 personas las que laboramos entre rotulista, torileros, porteros, mulilleros, personal de limpieza para tener nuestra plaza limpia antes y después de cada festejo”, reconoce.
Todas estas personas se han visto en la necesidad de buscar empleos ocasionales, primero con la esperanza de que la pandemia terminara y regresara la feria a Puebla y con ello las corridas de toros.
Pero ante la propuesta de la presidenta municipal Claudia Rivera Vivanco, el servicio de plaza, más vendedores, taquilleros, personal técnico, entre muchos otros podrían verse en la realidad de ver frustrada una fuente de ingreso segura.
GANADERO JOSÉ ANTONIO GONZÁLEZ
El ganadero José Antonio González Esnaurrizar de La Joya, dijo: “Puede gustarle a poca gente, pero sí es una economía que gira en torno al toro bravo. En nuestro país, la tauromaquia tiene un valor global superior a los 5 mil quinientos millones de pesos. Nosotros los ganaderos en los primeros cuatro meses de esta pandemia dejamos de vender en México más de 1500 toros.
“No solo esto representa un impacto de mantenerlos en los potreros, sino que hay una afectación colateral en pagos de peaje, restaurantes, hotelería, pago a medios de comunicación por publicidad, servicio médico y muchas otras fuentes de empleo que se han visto golpeadas…” apuntó.
GANADERO MANUEL SESCOSSE
El ganadero de Villa Carmela, Don Manuel Sescosse, comentó que, a nivel Nacional, por conceptos de pago de impuestos, la tauromaquia representa un monto superior a los 800 millones de pesos anuales.
“El año pasado Puebla tuvo más de 10 festejos, lo que representa un ingreso valioso para el erario, prohibir las corridas en Puebla y más en estos tiempos donde hace falta una recuperación económica, sí afectaría sensiblemente a las arcas del municipio”, destacó.