Mucho se ha hablado a últimas fechas de las llamadas tormentas solares y uno de los cuestionamientos es si existe alguna manera de enfrentar este fenómeno que podría dejar sin Internet al mundo.
Acerca de este tema, los científicos refieren que se debe contar con planes de contingencia debido a que la próxima tormenta geomagnética se podría encontrar cerca, incluso la NASA recientemente detectó un intenso destello solar que podría causar este fenómeno entre el sábado 30 y el domingo 31 de octubre.
Incluso recientemente una investigadora de la Universidad de California retomó el tema en un evento con expertos de telecomunicaciones e incluso llamó a su conferencia “Supertormentas solares: planeando un apocalipsis de internet”.
Acerca de cómo enfrentar este fenómeno espacial, los especialistas afirman que si bien no se podría garantizar la normalidad de las comunicaciones a nivel global, tanto la infraestructura local como la regional de diversas zonas del mundo no sufrirán una afectación.
De acuerdo con la misma investigadora, esta protección en las comunicaciones sería posible debido a que la fibra óptica no se encuentra expuesta a los cambios que puede enfrentar con una tormenta solar, el campo electromagnético.
Sobre el motivo de las afectaciones en los sistemas submarinos, su fragilidad se debe a que su diseño incluye repetidores que se disminuyen cada 50 o 150 kilómetros, con la finalidad de ampliar la señal y evitar pérdidas de información, mismos componentes que son vulnerables a dichas radiaciones.
¿CUÁLES PODRÍAN SER LAS ZONAS MÁS AFECTADAS POR UNA TORMENTA SOLAR?
Los científicos han referido también que en caso de una tormenta geomagnética las primeras zonas en sufrir una afectación serían las zonas más cercanas a los polos.
Sobre el transporte aéreo, la actividad en esta misma área también sería afectada tal y como en el año 2012 sucedió con algunos vuelos de Delta Air Lines por una llamarada solar.
Pero la principal preocupación en cuanto a estas fallas, se debe a que las pérdidas económicas por este fenómeno serían de 7000 millones de dólares tan sólo en Estados Unidos y en sólo un día.
Finalmente los científicos calculan que aunque las tormentas solares a gran escala llegan a ser raras, se producen cada 100 o 200 años.