Un hombre llamado Wim Hof, mejor conocido como "El hombre de hielo", pudo subir el monte Everest solo en pantalones cortos, no necesitó otra cosa, ni tanques de oxígeno ni algún otro tipo de ropa. Escaló una altura de 7,200 metros, pero detrás de este logro hay una triste historia.
Él creció en Holanda, lo que le permitió desarrollar una gran resistencia a las bajas temperaturas, pero él fue más allá, y no por egocentrismo o ambición, él lo hizo como una estrategia de rehabilitación.
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Cumplió con este objetivo a la edad de 50 años; tiempo después participó en un maratón en el desierto de Namib, durante su recorrido no necesitó tomar agua. Dos años más tarde estuvo en una carrera descalzo en un ambiente ártico.
¿QUÉ LO MOTIVÓ A REALIZAR ESTA HAZAÑA?
Win Hof contó que conoció a su esposa cuando tenía 20 años, él la describe como extrovertida, tenía una muy buena actitud con todos, por estas cualidades la llamó mariposa, tuvieron hijos y por mucho tiempo estuvieron juntos.
Con el paso de los años ella empezó a comportarse diferente, parecía que toda la energía que emitía se apagaba. Describió ese momento como el más obscuro de su vida, desde ese instante todo empeoró.
Una madrugada ella se acercó al dormitorio de sus hijos para despedirse de ellos, y luego saltó desde una altura de ocho pisos. El impacto acabó con su vida inmediatamente, Win Hof aún pudo acercarse a ella para abrazarla y llorar.
Desconsolado pasó cerca de un lago con agua congelada, vio la capa de hielo que la cubría, así que decidió entrar en ella. Dice que en ese momento se sintió diferente, al siguiente día hizo lo mismo, y así encontró la fuerza suficiente para cuidar de él y sus hijos.
Esto lo llevó a usar el frío como terapia, por eso tomó la decisión de escalar esta montaña en el año 2007. Desde entonces se ha dedicado a ayudar a la gente que necesita salir adelante.
LOS TRES PILARES DE WIN HOF
Él decidió compartir su experiencia con todo el mundo y sacó a la luz su método Wim Hof Method (WHM). Así mucha gente podría ser capaz de intentarlo para tratar sus problemas con la depresión.
Terapia en frío: Él se sumergió en agua helada durante 100 minutos, esta práctica le dio varios beneficios, por eso recomienda que las personas deben acostumbrase a las bajas temperaturas, esto lo conseguirán al tomar baños de agua fría.
Respiración: Al controlar el aire que entra y sale de nuestro cuerpo es más sencillo hacerle frente a las condiciones heladas del clima. Así se puede regular la temperatura de todo el organismo y sobrevivir.
Compromiso: Para alcanzar estos dos pilares, es necesario comprometerse, no son hábitos que se practiquen de vez en cuando, es un modo de vida y debe adoptarse como tal; en caso contrario nada va a funcionar.