Terminó el mes del testamento y mucho se habló de lo que debían hacer quienes buscaran dejar algún bien a un ser querido, pero poco se dijo acerca del proceso que deben seguir quienes heredaron una vivienda.
Una de las primeras acciones que deben seguir quienes saben que han pasado a ser los dueños de una propiedad es acudir a una revisión del testamento.
Cabe señalar que no solo los bienes, sino que también ciertos derechos y obligaciones son heredados.
Este proceso se lleva a cabo de la mano de un notario y los beneficiarios deben ser mayores de edad, además de estar de acuerdo con lo estipulado.
En caso de ser menor de edad o no todos los involucrados estén de acuerdo, el trámite pasará a manos de un Juzgado Familiar.
Una vez validado el testamento y elaborado el instrumento en el que los herederos y albacea acepten la herencia se deberá proceder al cambio de escrituras, a fin de dar fe, institucional, civil y públicamente de que una propiedad pertenece a determinada persona.
Pero eso no es todo, pues se deberá pagar impuestos por la obtención de un inmueble mediante una herencia y el monto varía según el costo de la propiedad.
Aunque esta condición no aplica en la herencia de bienes muebles, como artículos personales, vehículos, joyas, etcétera, o por la herencia de dinero.
¿QUÉ PASA SI UNA PERSONA MUERE SIN DEJAR UN TESTAMENTO?
El hecho de que una propiedad quede sin dueño tras la muerte de su propietario, debido a que este no realizó un testamento se le conoce como un bien intestado, por lo que para realizar algún movimiento de dicha propiedad se debe hacer un trámite de sucesión intestada, a fin de determinar un nuevo propietario.
Incluso esto sucede si el heredero no incluyó determinada propiedad en su testamento o en dicho documento no hay instrucciones cobre quién será un nuevo dueño.