Dentro de los tipos de personalidades que existen, muchas veces podemos escuchar a alguien decir que otra persona es psicópata. Esto se debe a que el término no se refiere a un diagnostico oficial, como a veces los contenidos del cine y la televisión lo plantean, pues proyectan a alguien extremadamente diferente, violento o que está loco.
Pero, la psicopatía se expresa de manera diferente, muchas veces empujando al individuo a confiar en su alta inteligencia como en su encanto personal. A pesar de ser señalado como fríos o inhumanos, son personas con la misma capacidad de demostrar afecto, pero a la vez, mostrar profunda desconfianza en quien no forma parte de su círculo cercano.
¿QUÉ ES LA PSICOPATÍA?
Para definir este rango de personalidad podemos decir que la psicopatía se caracteriza en personas que demuestran una gran inteligencia como un encanto superficial, a la vez tienen una falta de juicio y difícilmente aprenden de la experiencia al dar mucho peso a su egocentrismo patológico.
Esto se junta con elementos como la falta de remordimiento o vergüenza, impulsividad, ser un mentiroso patológico, comportamiento manipulador, conducta sexual promiscua y hasta tener versatilidad criminal.
Pese a esto, tienen similitudes con otros en el sentido de que son capaces de amar a sus padres y tener pareja como hijos, pero, sufren para poder demostrar este tipo de amor o confianza en personas externas. Algo que puede afectarlos son las separaciones, por lo que pueden tener consecuencias emocionales si sufren eventos como el divorcio de sus padres, el rompimiento de una relación o la muerte de una persona cercana.
RASGOS DE ESTE TIPO DE PERSONAS
Dentro de las características que puede presentar una persona psicópata, es el encanto superficial, esto al hablar de las personas o referirse a otros siempre enfocándose en su apariencia. Al elegir con quién hablar puede centrarse en mujer u hombres jóvenes, físicamente atractivos y sus insinuaciones irán desde lo sutil hasta ser algo insensible solo para demostrar que puede conquistar a alguien.
Por ello, suelen ser personas con una alta autoestima, aunque no tengan los méritos para ello siempre estarán en busca de dominar las situaciones y ser controladores. Aquí es donde puede presentarse la violencia si notan que es su último recurso para ganar algo.
Llegan a tener problemas para relacionarse con otros, suelen ser personas con capacidad disminuida para vincularse con otros y siempre se siente por encima de ellas. Si es necesario, usará el engaño como herramienta para conseguir sus objetivos y si detecta que puede manipular a alguien no dudará en hacerlo.
Ante esta tendencia de manipulación y engaño, suelen ser personas difíciles de descifrar, siendo capaces de crear personalidades que se adapten mejor a los escenarios donde conviven. Muchos comparan este tipo de rasgos en casos extremos con los asesinos seriales, donde suelen ser personas con encanto hasta que sus víctimas ven muy tarde su verdadera personalidad.
Respecto a sus emociones, aunque puede parecer expresivamente presente, siempre es indiferente a las situaciones como a otros. Su insensibilidad como egoísmo hace que todas las conversaciones se traten sobre él o cambie el tema si nota que involucra los sentimientos de otra persona.
Son personas que están en búsqueda de estímulos, al estar constantemente desconectados de los otros, siempre está en búsqueda de situaciones de riesgo en donde pueda actuar, por lo que también suelen ser impulsivos. Esto se va desarrollando con los años, de forma que su conducta puede ser vista como incorrecta o como alguien que cometió actos que no debía a lo largo de su vida.