Esteban Amaro, un hombre de 69 años, enfrentó uno de los momentos más oscuros de su vida: la depresión y ataques de ansiedad que nunca había experimentado. A pesar de los esfuerzos de su familia por buscar ayuda médica, nada parecía aliviar su sufrimiento.
Fue entonces cuando, con la determinación de su esposa, Mercedes Pasilla, decidieron explorar nuevas alternativas y llegaron a la equinoterapia. En tan solo cuatro sesiones, algo milagroso sucedió: Esteban comenzó a renacer. Volvió a salir de su casa, a sonreír, y ahora se describe a sí mismo como un amante de los caballos.
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Originario de Santa María Guadalupe, en Tecola, Esteban creció en una comunidad tradicionalista donde hablar de la depresión y la ansiedad en hombres era un tabú. Sin embargo, Mercedes, con un amor inquebrantable, asumió la responsabilidad de buscar especialistas.
Su sorpresa fue mayúscula al encontrar en su propia comunidad un Centro Integral Ecuestre llamado El Capricho, que ofrecía servicios gratuitos para algunas personas de bajos recursos.
Mi esposo había caído en un profundo silencio. Ya no quería comer, no quería salir de la cama, solo anhelaba dormir. Todo lo molestaba, incluso el ruido de los cohetes y los trastes. Lo convencí para que intentara la terapia, ya que sólo deseaba estar en pazcompartió Mercedes con la voz entrecortada.
Desde que comenzó su tratamiento en El Capricho hace tres meses, la transformación de Esteban ha sido notable. Ahora sale, saluda a los vecinos y ha recuperado su pasión por caminar. Aunque algunos en el pueblo aún dudan de su cambio, su familia está convencida de que el vínculo con los caballos y las más de 10 sesiones han hecho toda la diferencia.
Esteban participa en un programa llamado “Mejorando vidas”, que ofrece equinoterapia gratuita a quienes más lo necesitan. Sin embargo, El Capricho enfrenta un desafío: requieren recursos para continuar brindando apoyo no solo a Esteban, sino a muchas más personas que esperan una oportunidad para sanar.
Con un impresionante récord de 60 terapias semanales, la demanda es abrumadora; hay 200 personas en lista de espera. El Capricho busca reclutar a más de 100 “Donadores Altruistas” que patrocinen sesiones de equinoterapia para niños, adolescentes y adultos mayores. Una vez que logren este primer objetivo, aspirarán a expandir su programa y ayudar a aún más personas.
¿Qué es la equinoterapia?
La equinoterapia es una disciplina que utiliza la interacción con caballos como herramienta terapéutica, promoviendo la estimulación neuromuscular, psicológica y social.
Se enfoca en el desarrollo físico y emocional, mejorando la motivación, la atención y la confianza de sus participantes. Es especialmente beneficiosa para personas con autismo, déficit de atención e hiperactividad, depresión, ansiedad, entre otras condiciones.
Si deseas unirte a esta noble causa y ayudar a transformar vidas, puedes enviar un mensaje al 223 167 4857 o escribir a ciecaprichopuebla@outlook.com. Allí te brindarán todos los detalles sobre la cena de recaudación de fondos que se llevará a cabo el próximo 29 de noviembre, donde el boleto tendrá un costo de 2,500 pesos.
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Un pequeño gesto puede marcar la diferencia en la vida de quienes más lo necesitan. Esteban y muchos otros esperan que tú seas parte de su historia de esperanza y renacimiento.
