El Hospital de La Margarita sigue sumando señalamientos por presuntos actos de negligencia. En este nosocomio -donde hace unos días cortaron “por accidente” 15 centímetros la cabeza de un bebé durante un alumbramiento por cesárea- ahora la familia Flores Ortiz acusó el fallecimiento de su hija Rocío quien, tras ingresar por un ajuste del catéter de hemodiálisis, fue trasladada al área de Covid, lo que a decir de los familiares fue lo que causó su muerte.
En entrevista con El Sol de Puebla, la familia narró los hechos y señalaron que durante cuatro días Rocío estuvo internada en el Hospital de San José por un problema renal. A su egreso, le extendieron un documento en el que le indicaron que era paciente sospechosa a Covid-19, no obstante, al no presentar una condición de gravedad podía continuar con los cuidados correspondientes en su hogar.
“Actualmente paciente con mejoría clínica sin necesidad de oxígeno complementario y presentando saturación de oxígeno estable, se egresa del servicio con el siguiente plan: cita abierta a urgencias, permanecer en resguardo domiciliario por 14 días y tratamiento de enfermedad renal sin cambios”, se lee en el documento que le extendieron el día miércoles 12 de agosto.
Al día siguiente, es decir, el jueves 13 de agosto, la joven de 27 años de edad empezó a sangrar por el catéter que recientemente le habían colocado. Ante esta situación decidieron trasladarla a la Unidad Médica de Atención Ambulatoria (UMAA) ubicada frente al exhospital San Alejandro para que únicamente le hicieran un ajuste en la sonda. Ahí les indicaron que era mejor trasladarla al Hospital de La Margarita para una revisión detallada y evitar alguna complicación.
Fue así que la familia decidió llevarla ese mismo día al nosocomio, no obstante, pese a que la joven no presentaba complicaciones respiratorias, los médicos indicaron que tenía que ser ingresada al área Covid.
“Nosotros pedimos que no lo trasladaran a esa área y aun así el doctor la trasladó. En ese momento el doctor no tenía una prueba real de que ella tuviera Covid. A ella la acababan de dar de alta y su problema no era el Covid, ella estaba sangrando por el catéter. Tampoco tenía problemas de respiración, incluso llegó por su propio pie”, compartió su madre.
A pesar de que los familiares mostraron el documento en el que advertían que su hija podía seguir el tratamiento en casa y que en ese momento lo único que requería era el ajuste de la sonda para detener la hemorragia, los médicos le indicaron que le tenían que colocar el oxígeno.
“Mi hija me habló a las 12 de la noche y me dijo ´Mami, por favor, sácame de aquí porque ya me pusieron el oxígeno y no lo necesito, yo sí puedo respirar´. En la madrugada me indicaron que necesitaban unos papeles de mi hija y cuando llegamos mi hija había muerto. Cuando me la entregaron tenía su nariz toda morada, porque ellos le pusieron el oxígeno. Fue una negligencia, mi hija no tenía por qué morir, ella iba por otra cosa”, refirió la mamá de Roció.
La madre de Rocío lamentó que las familias estén atravesando por este tipo de situaciones y que, a pesar de que son varios los señalamientos hacia el hospital no se tomen cartas en el asunto. “Yo quise dar a conocer esto para que la gente sepa qué es lo que esté pasando y cuando vayan al doctor tengan mucho cuidado, no es la primera vez que pasan este tipo de cosas”, consideró.
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