/ jueves 3 de noviembre de 2022

Llorar, estornudar o reír son reacciones post-orgásmicas que tienen una explicación

Los especialistas mencionaron que, en muchos casos, después de tener relaciones sexuales se generan reacciones inusuales

Los actos sexuales son realizados por la mayoría de seres humanos. En ellos se estimulan diferentes zonas erógenas con la intención de generar placer hasta que se alcanza el clímax, conocido como orgasmo. Estas prácticas son naturales, ya que son consideradas una necesidad fisiológica, al igual que alimentarse o dormir.

Más allá de la reproducción, la gente lo hace por satisfacción, sin embargo, se detectó que varias personas tienen reacciones poco usuales después de haber estado con su pareja, que puede ir desde experimentar varios sentimientos como tristeza o culpa, o malestares como tos o estornudos. Esto ocurre incluso si no hay un factor real que lo provoque.

Esto quiere decir que, hay casos en los que la relación sexual es placentera en todos los aspectos, y no hay motivos para desarrollar alguna emoción negativa, pero uno de los involucrados llora o se molesta. Este tipo de fenómenos han captado la atención de la comunidad científica, por lo que han hecho diferentes investigaciones, esto han encontrado.

¿Por qué estás triste después del sexo?

Cuando alguien tiene sentimientos de tristeza, melancolía o malestar sin ningún motivo real puede estar experimentado disforia postcoital, que es un trastorno sexual que tiene altas posibilidades de causar disminución del deseo sexual, peleas de pareja, alejamiento y rechazo.

Lo primero que se recomienda para evitar problemas es hablarlo con la otra persona, y se puede fomentar el uso de abrazos y caricias después de tener relaciones. A esta conclusión llegaron los autores Schweitzer, O’Brien y Burri, quienes publicaron el articulo ‘Postcoital Dysphoria: Prevalence and Psychological Correlates’.

Asimismo, se explicó que si no se trata de forma profesional puede generar culpa hacia el coito, a pesar de que no haya una razón para tenerla. Esto le pasa a varones y mujeres. Por otro lado, Gil Vera en su publicación ‘Disforia postcoital sexual en la vida conyugal’, sostuvo que esto tiene un origen químico.

En este estudio se detalló que al tener relaciones sexuales aumentan los niveles de la dopamina, endorfinas, oxitocina y prolactina, que generan emociones intensas, pero al terminar estos parámetros bajan, provocando un efecto rebote.

Igual, esto puede estimular la oxitocina, que produce una sensación de desarrollar una conexión especial con la otra persona, le gente con esta preferencia recibe el nombre de demisexual. Pero si, al contrario, se genera felicidad, es resultado de las endorfinas.

¿De dónde viene la tos post-orgasmo?

En ocasiones, los hombres tienen tos, estornudos, dolor de pies, comezón, malestar en los oídos o en la cabeza después de eyacular. Esto puede ser consecuencia del síndrome de enfermedad post-orgásmisca.

Este padecimiento suele estar acompañado de fatiga, febrícula, sudoración, cambios en el estado de ánimo, irritabilidad, problemas de memoria, dificultad de concentración, congestión o picor en los ojos. Por lo regular, esto dura de dos a siete días.

Esta condición es una de la más extrañas, ya que dentro de los registros médicos solo se han contabilizados 50 casos. Por el momento no se conoce su origen; una teoría señala que puede ser resultado de una alergia al semen, que se refleja como una hipersensibilidad.

Los actos sexuales son realizados por la mayoría de seres humanos. En ellos se estimulan diferentes zonas erógenas con la intención de generar placer hasta que se alcanza el clímax, conocido como orgasmo. Estas prácticas son naturales, ya que son consideradas una necesidad fisiológica, al igual que alimentarse o dormir.

Más allá de la reproducción, la gente lo hace por satisfacción, sin embargo, se detectó que varias personas tienen reacciones poco usuales después de haber estado con su pareja, que puede ir desde experimentar varios sentimientos como tristeza o culpa, o malestares como tos o estornudos. Esto ocurre incluso si no hay un factor real que lo provoque.

Esto quiere decir que, hay casos en los que la relación sexual es placentera en todos los aspectos, y no hay motivos para desarrollar alguna emoción negativa, pero uno de los involucrados llora o se molesta. Este tipo de fenómenos han captado la atención de la comunidad científica, por lo que han hecho diferentes investigaciones, esto han encontrado.

¿Por qué estás triste después del sexo?

Cuando alguien tiene sentimientos de tristeza, melancolía o malestar sin ningún motivo real puede estar experimentado disforia postcoital, que es un trastorno sexual que tiene altas posibilidades de causar disminución del deseo sexual, peleas de pareja, alejamiento y rechazo.

Lo primero que se recomienda para evitar problemas es hablarlo con la otra persona, y se puede fomentar el uso de abrazos y caricias después de tener relaciones. A esta conclusión llegaron los autores Schweitzer, O’Brien y Burri, quienes publicaron el articulo ‘Postcoital Dysphoria: Prevalence and Psychological Correlates’.

Asimismo, se explicó que si no se trata de forma profesional puede generar culpa hacia el coito, a pesar de que no haya una razón para tenerla. Esto le pasa a varones y mujeres. Por otro lado, Gil Vera en su publicación ‘Disforia postcoital sexual en la vida conyugal’, sostuvo que esto tiene un origen químico.

En este estudio se detalló que al tener relaciones sexuales aumentan los niveles de la dopamina, endorfinas, oxitocina y prolactina, que generan emociones intensas, pero al terminar estos parámetros bajan, provocando un efecto rebote.

Igual, esto puede estimular la oxitocina, que produce una sensación de desarrollar una conexión especial con la otra persona, le gente con esta preferencia recibe el nombre de demisexual. Pero si, al contrario, se genera felicidad, es resultado de las endorfinas.

¿De dónde viene la tos post-orgasmo?

En ocasiones, los hombres tienen tos, estornudos, dolor de pies, comezón, malestar en los oídos o en la cabeza después de eyacular. Esto puede ser consecuencia del síndrome de enfermedad post-orgásmisca.

Este padecimiento suele estar acompañado de fatiga, febrícula, sudoración, cambios en el estado de ánimo, irritabilidad, problemas de memoria, dificultad de concentración, congestión o picor en los ojos. Por lo regular, esto dura de dos a siete días.

Esta condición es una de la más extrañas, ya que dentro de los registros médicos solo se han contabilizados 50 casos. Por el momento no se conoce su origen; una teoría señala que puede ser resultado de una alergia al semen, que se refleja como una hipersensibilidad.

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