Hacer ejercicio mientras se está enfermo es un tema que genera dudas, especialmente para quienes tienen una rutina regular de actividad física, consultar con expertos sobre cuándo es adecuado continuar entrenando y cuándo detenerse puede marcar la diferencia en el proceso de recuperación.
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El cuerpo da señales claras que no deben ser ignoradas, ya que el ejercicio inapropiado podría agravar los síntomas o prolongar la enfermedad, por lo que es crucial entender cómo ajustar la intensidad del ejercicio según el tipo de malestar, asegurando que la actividad no comprometa la salud.
¿Se puede hacer ejercicio enfermo?
El New York Times habló con diversos médicos para llegar a la conclusión sobre cuando es importante detener el entrenamiento físico, determinando que es primordial prestar atención a los síntomas, en el caso que se tenga encima del cuello como secreción nasal, congestión o dolor de garganta se podrá seguir si el estado de ánimo lo permite.
Sin embargo, si se extienden al resto del cuerpo y se hacen presentes dolores musculares o ritmo cardiaco anormal es necesario parar ya que podría significar que el cuerpo está haciendo un esfuerzo mayor a lo que está acostumbrado y la actividad podría alargar el tiempo de recuperación.
Asimismo, los especialistas recomiendan tener máximo cuidado en casos de vomito y diarrea ya que el ejercicio podría provocar deshidratación, además en caso de estar en recuperación por alguna cirugía o afectación grave lo mejor es preguntarle al medico de cabecera si se puede practicar deporte.
Ejercicios de bajo impacto
Los ejercicios aeróbicos o dinámicos son un tipo de método de baja a mediana densidad para las personas y se incluyen hacer bicicleta, correr o caminata y natación, por mencionar algunos. Con este tipo de movimientos el cuerpo tiene un consumo mayor de oxigeno y ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares y disminuye la glucosa en sangre.
“Cabe señalar que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS). Las enfermedades cardiovasculares son responsables de 17 millones de muertes en el mundo, representando un 29.82%”, menciona el Gobierno de México en su sitio oficial.
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En su contraparte, los ejercicios anaeróbicos son aquellos que requieren un mayor esfuerzo y están catalogados como de alta densidad, entre ellos se encuentra el levantamiento de pesas, carreras de velocidad y lo relacionado con resistencia, por lo que en caso de estar enfermo se sugiere evitarlos hasta estar en una mejor condición.
