La empresa alemana Volkswagen amplió el periodo de actividades hasta el próximo 30 de abril, en cumplimiento al decreto de emergencia sanitaria que publicó el gobierno federal el pasado 31 de marzo en donde se ordena la suspensión de actividades no esenciales en el país.
A través de un comunicado, la armadora dio a conocer que mantendrá el salario íntegro de los trabajadores hasta este periodo, que se extiende 17 días más de lo que anunció la empresa el pasado 20 de marzo.
En un entorno de enormes desafíos como consecuencia de esta pandemia, en donde se espera un fuerte impacto a los mercados, se reitera que, de acuerdo con la información que ha sido emitida y a la comunicación que han tenido los managers con los equipos de trabajo, la empresa mantendrá la remuneración íntegra de todos los colaboradores en el periodo señalado en el punto uno de este comunicado
Inicialmente, la empresa había anunciado dos semanas de suspensión de actividades que inició el pasado 30 de marzo y concluiría el próximo 13 de abril.
Para estas dos semanas, Volkswagen implementó un esquema de pagos al 50 por ciento y el 50 por ciento restante a cuenta de las utilidades de mayo, además de un esquema de adelanto de vacaciones para Semana Santa.
Las funciones de seguridad y de mantenimiento continuarán realizándose con estrictas medidas de prevención e higiene, mientras que las actividades administrativas se harán parcialmente desde casa de los trabajadores, agregó la empresa.
La falta de demanda en el mercado y la dificultad de adquirir piezas para realizar el armado de vehículos son otros de los factores que llevaron a la trasnacional a tomar esta decisión.
Asimismo, se monitorea permanentemente el estimado de disminución en la demanda del mercado mexicano y en otros mercados internacionales, así como el creciente riesgo de desabasto de partes para poder llevar a cabo los procesos de manufactura
En su comunicado, la empresa otorgó un voto de confianza al gobierno federal para que implemente un plan de reactivación económica una vez que pase la contingencia.
“Confiamos en las acciones que tome el gobierno federal para que promueva el fortalecimiento financiero del sector privado, que coadyuve a contar con una reactivación económica tan pronto esta emergencia concluya”.
Fue el pasado 11 de marzo cuando se confirmó el primer caso de coronavirus en Puebla, por parte de un proveedor extranjero que impartió un curso de capacitación en la planta de Cuautlancingo, Puebla, donde tuvo contacto con 40 trabajadores de la empresa.
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