De un total de un millón 798 mil 560 poblanos que tienen un trabajo actualmente, el 54 por ciento no recibe las prestaciones de ley como lo es el servicio médico, aguinaldo, vacaciones, reparto de utilidades, incapacidad, Afore y crédito para la vivienda.
Lo anterior representa que 971 mil 222 personas se encuentran en la informalidad laboral, mientras que solo 827 mil 338 tienen un empleo formal de acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En entrevista Anselmo Salvador Chávez Capó, investigador de la Licenciatura en Administración Financiera y Bursátil de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep) comentó que esta situación afecta el futuro de los poblanos pues al no contar con prestaciones se enfrentarán a una crisis económica cuando lleguen a la tercera edad.
“En un futuro esas personas van a tener la necesidad de servicios sociales de salud, dinero, retiro y contar con una casa, pero si no tuvieron prestaciones tendrán un retiro complicado e incierto cuando terminen su vida laboral y será cuando tengan más de 60 años. (…) Incluso cuando sean mayores van a necesitar de un seguro y si no tienen acceso a él se enfrentarán a más problemas”, detalló.
En el Censo de Población y Vivienda 2020 se detalló que, del total de la población económicamente activa, un millón 158 mil 252 son hombres, de los cuales el 58 por ciento no cuentan con prestaciones, lo que representa a 671 mil 786 habitantes.
Mientras que de las 640 mil 308 mujeres con un empleo, el 46 por ciento se enfrenta a la informalidad laboral, lo que significa un total de 294 mil 541.
El especialista comentó que, el incremento en la tasa de informalidad laboral se debe a la pandemia por la Covid-19 que provocó que las personas perdieran su empleo formal, y ante la necesidad de generar un recurso decidieron mudarse a una actividad sin prestaciones.
“Esta situación es un reflejo de la pandemia pues hubo una disminución del personal contratado en empresas formalmente establecidas. (…) Ante la necesidad de llevar dinero a sus hogares encontraron un respiro económico en la informalidad, donde bien sabemos las personas que se desempeñan ahí difícilmente tendrán prestaciones”, informó.
Es así que, del millón 798 mil 560 poblanos que tienen un empleo, solo un millón 348 mil 929 cuentan con servicio médico (75 por ciento); un millón 672 mil 660 con aguinaldo (93 por ciento) y un millón 384 mil 891 con vacaciones (77 por ciento).
Por otra parte, solo 899 mil 280 reciben reparto de utilidades (50 por ciento); un millón 205 mil 035 tienen derecho a incapacidad (67 por ciento); un millón 223 020 cuentan con Afore (68 por ciento) y un millón 133 mil 092 son acreedores a un crédito para la vivienda (63 por ciento).
El inegi reportó que los funcionarios, directores y jefes son los que más reciben prestaciones con un 89 por ciento, seguido por los trabajadores de actividades administrativas con un 81 por ciento.
Posteriormente le siguen los profesionistas y técnicos con un 78 por ciento; operadores de maquinaria industrial, ensambladores, choferes y conductores del transporte con un 60 por ciento; comerciantes, agentes de ventas y vigilantes con un 51 por ciento.
En contraste, las actividades que menos reciben prestaciones son los trabajadores de apoyo con un 24 por ciento; empleados artesanales y de la construcción con un 21 por ciento y por último aquellos que se dedican a la ganadería, pesca y caza con solo un 6 por ciento.
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