La actividad económica de Puebla tuvo una caída de -4.73 por ciento de enero a marzo, un poco antes del inicio de la contingencia sanitaria por coronavirus, reporta el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
A través del Indicador Trimestral de Actividad Económica Estatal (ITAEE), se da a conocer que la entidad se ubica en el quinto lugar nacional con más pérdida financiera en el primer trimestre de este año.
Las entidades con menor actividad económica son: Baja California Sur con -6.81 por ciento, seguido de Quintana Roo y Coahuila con -5.85 y -5.80 puntos porcentuales, respectivamente.
Hidalgo se encuentra cuarto lugar nacional con -4.91 por ciento, le sigue Puebla con una baja de -4.73 en sus actividades primarias, secundarias además de terciarias, y con -4.01 por ciento se posiciona Querétaro.
El indicador, dado a conocer de manera trimestral, ofrece un panorama sobre la evolución económica de las entidades federativas del país.
Sólo seis estados tuvieron un crecimiento que son: Tabasco con un aumento de 9.15 por ciento, Colima con 2.63 puntos porcentuales, Sonora con 2.07 por ciento y con 1.52 puntos porcentuales Veracruz.
Con ligero incremento están además Chiapas, Campeche y Guanajuato con 0.47, 0.17 y 0.06 por ciento, respectivamente.
PUEBLA DE CRECIMIENTO A CAÍDA
En el primer trimestre de 2019, Puebla tuvo un crecimiento económico de 3.8 por ciento, no obstante, para este 2020, la cifra correspondió de manera negativa a -4.73 por ciento.
La caída de actividad económica en la entidad se da entre el inicio pandemia por coronavirus. El año pasado, la entidad ocupaba el cuarto lugar en crecimiento, ahora, el quinto más negativo en México.
En las actividades primarias, que incluyen la agricultura; cría y explotación de animales; aprovechamiento forestal, la entidad poblana tuvo un ligero crecimiento de 0.9 por ciento.
No obstante, en las actividades secundarias que integran la construcción e industrias manufactureras, además de la minería; la producción de petróleo y gas, por mencionar algunos, van a la baja con un 11.2 por ciento.
También, hay un decremento de -11.1 por ciento para las actividades secundarias sin minería-petrolera.
La caída es de -1.2 por ciento para las actividades terciarias, que representan la distribución de bienes, los servicios afines al conocimiento, la recreación, además de la parte gubernamental, entre otros rubros.
