Las pocas lluvias, el aumento de precios en los insumos y el bajo capital de los productores para invertir harán que en este 2023 la cosecha de caña de azúcar en Puebla, que termina en mayo, sea una de las más bajas de los últimos cuatro años, es decir, desde el 2019.
Como consecuencia, los 8 mil 473 agricultores que se dedican a la actividad en 13 municipios del estado se verán afectados económicamente, pues se espera una pérdida de 185 millones 199 mil 090 pesos, en comparación del 2019, lo que reducirá su poder adquisitivo para seguir teniendo una vida estable.
Tras este panorama, los productores ya buscan otras fuentes de ingreso para estabilizar sus finanzas, entre las que se encuentra la siembra de granos básicos, como el frijol, el maíz y el arroz.
Datos oficiales del Comité Nacional para el Desarrollo Sustentable de la Caña de Azúcar (Conadesuca) informan que en la zafra o cosecha de este año se tiene proyectada la producción de un millón 748 mil 300 toneladas de producto en la entidad, lo que sumaría una derrama económica de mil 975 millones 579 mil pesos, tomando en cuenta que la tonelada tiene un precio promedio de mil 130 pesos.
Sin embargo, hace cuatro años (en 2019) la cosecha total fue de un millón 912 mil 193 toneladas de caña de azúcar, que generó ingresos para los productores de 2 mil 160 millones 778 mil 090 pesos, es decir, 185 millones 199 mil 090 pesos más que ahora, sin contar las variantes por inflación.
Es importante mencionar que la cifra de producción esperada para este año también es menor a la reportada en 2022, que fue de un millón 885 mil 107 toneladas; a la de 2021, de un millón 753 mil 270 toneladas, y a la de 2020, de un millón 780 mil 216 toneladas.
Son tres las causas que disminuyen la cosecha de caña
De acuerdo con Eliseo Morales Rosales, presidente en Puebla de la Confederación Nacional de Productores Rurales (CNPR), son tres las causas principales que están disminuyendo la cosecha de caña en Puebla.
El primer problema es la sequía por falta de lluvias, lo que está generando que los terrenos pierdan su humedad normal, impidiendo con ello el desarrollo exitoso del cultivo.
El segundo es la falta de recursos de los productores derivado de la pandemia por la Covid-19, por lo que este año tienen menos dinero para invertir en materia prima y mano de obra.
El último inconveniente es el aumento de precios en los insumos, como insecticidas y fertilizantes, derivado de la inflación y la guerra de Rusia contra Ucrania, que son los principales países distribuidores de estos productos.
“Estos son los factores que han hecho que tengamos bajos rendimientos y que nuestras cañas estén cortas y raquíticas. Esto está repercutiendo directamente en el bolsillo de los productores, así como de sus trabajadores, como cortadores, recolectores y operadores de maquinaria”, señaló.
Debido a esta situación, el líder cañero hizo un llamado a las autoridades estatales para que apoyen a la actividad con recursos económicos e insumos gratuitos durante las temporadas difíciles.
“El gobierno debe saber la situación en la que nos encontramos, nosotros seguimos trabajando para satisfacer la demanda de azúcar en el mercado, sin embargo, nuestras utilidades son menores”, subrayó.
Los insumos se encarecieron hasta en un 100%
Sobre el tema del aumento de precios, Fernando Leyva, encargado de la tienda de insumos de la CNPR, detalló que estos se han llegado a encarecer hasta en un 100 por ciento.
Como ejemplo puso el caso de los abonos, los cuales incrementaron su valor en un 120 por ciento (pasaron de 500 pesos a mil 100 pesos), así como las fórmulas balanceadas para la caña, con un alza del 116 por ciento (de 600 pesos a mil 300 pesos).
También se encuentra el caso de los fertilizantes, que tuvieron un aumento del 66 por ciento (de 600 pesos a mil pesos), y los insecticidas, 50 por ciento (de 190 pesos a 290 pesos).
Debido a esta situación, Fernando explicó que los productores han disminuido de manera considerable su consumo de materia prima para la producción de caña del 2023.
“Antes se llevaban cinco productos y ahora nada más tres, ya que de esta manera buscan generar un poco más de rentabilidad en su cosecha, ya que se si compran la misma cantidad, las utilidades serán menores (…) Esto también es un problema, ya que para que la caña crezca de buen tamaño necesitan dos abonadas, pero ahora le andan poniendo una y eso hace que el rendimiento del campo sea menor”, subrayó.
Productores buscan otras fuentes de ingresos para estabilizar sus finanzas
Debido a que en el 2023 se espera una mala zafra de caña de azúcar, los productores han comenzado a buscar otras fuentes de ingresos para no verse afectados económicamente y así poder estabilizar sus finanzas, lo que que les permita cubrir sus gastos corrientes como alimentación, vivienda, transporte y vestido.
En entrevista con El Sol de Puebla, Jaime Soto Martínez, productor del municipio de Izúcar de Matamoros, informó que, a parte de cosechar caña de azúcar, también ha empezado a sembrar maíz.
“Definitivamente las lluvias y el aumento de precios están haciendo que nuestras utilidades con la caña sean menores y no nos alcance para vivir. Debido a esto, me he visto en la necesidad de complementar mi actividad con la siembra de maíz para sacar un poquito más de dinero para llevar a mi casa”, indicó.
Para el agricultor, la zafra de caña de azúcar del 2023 es una de las más complicadas que le ha tocado vivir desde que comenzó a realizar la actividad en el año 2010.
“Podría decir a título personal que estoy muy preocupado por que esta época es la peor por la que he atravesado, ya que mi siembra no es la misma por falta de dinero y, a su vez, lo poco que pude producir no está teniendo el suficiente peso por falta de lluvias y fertilizantes”, explicó.
En la misma situación se encuentra Manuel Cortés Bravo, productor de caña en la localidad de Atencingo, ubicada en el municipio de Chietla, pues también busca generar dinero extra con la siembra de frijol.
“Ahorita lo que está pasando es que nuestra caña está creciendo poco y por lo tanto pesa menos y su valor en el mercado disminuye. Ahorita también me dedico a sembrar otras semillas para sacar más dinero, es poco lo que percibo, pero seguro para poder vivir estable”, mencionó.
Finalmente, el productor hizo el mismo llamado que el líder de la CNPR, que es la petición de apoyo por parte de las autoridades para darles financiamientos e insumos gratuitos para el campo.
Radiografía del sector cañero en Puebla
Cifras de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) dan a conocer que en el 2022 el estado de Puebla ocupó el séptimo lugar a nivel nacional con la mayor producción de caña de azúcar a nivel nacional, con un millón 885 mil 107 toneladas.
Lo anterior quedó por debajo de Veracruz, que registró 22 millones 252 mil 041 toneladas; de Jalisco, 6 millones 560 mil 714 toneladas; de San Luis Potosí, 5 millones 619 mil 830 toneladas; de Oaxaca, 3 millones 029 mil 195 toneladas; de Chiapas, 3 millones 019 mil 039 toneladas, y Tabasco, 2 millones 396 mil 260 toneladas.
Los municipios poblanos que se dedican a esta actividad agrícola son Atzala, Huaquechula, Chiautla, Chietla, Huehuetlán el Chico, Izúcar de Matamoros, San Juan Epatlán, San Martín Totoltepec, Tepeojuma, Tilapa, Tlapanalá, Xochiltepec y Tepexco.
Estas 13 localidades suman una superficie de siembra en toda la entidad de 14 mil 104 hectáreas, de las cuales, las tres más importantes son Izúcar de Matamoros, con 5 mil 031; Chietla, con 4 mil 675, y Tilapa, con mil 395.
