La operación del Aeropuerto Internacional de Puebla “Hermanos Serdán” quedó en manos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) a través de la empresa Grupo Aeroportuario, Ferroviario, de Servicios Auxiliares y Conexos, Olmeca-Maya-Mexicana.
Después de cinco meses del anuncio que emitió el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se emitió un decreto en el Diario Oficial de la Federación (DOF), a través del cual se precisó que la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes asignó la administración del aeródromo ubicado entre los municipios de Huejotzingo, Juan C. Bonilla y Tlaltenango (así como de Uruapan en Michoacán y Palenque en Chiapas) a la empresa GAFSACOMM.
En el documento, que fue publicado este 28 de noviembre, se indicó que la Sedena tiene la facultad de administrar, operar, explotar y construir en el Aeropuerto Internacional de Puebla. Dicho aeródromo, estaba a cargo de Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) desde 2014.
Según la asignación, el titular de la empresa paraestatal presentó su renuncia formal a la concesión mediante oficio ASA/A/209/2023 el pasado cuatro de octubre.
Aunado a lo anterior, el documento detalló que la empresa de la Sedena, a cargo del General René Trujillo Miranda, cuenta con la capacidad jurídica, técnica, administrativa y financiera para ser titular de la asignación y ejercer los derechos y obligaciones establecidos.
En ese sentido, se debe elaborar un programa de desarrollo con base en las políticas y programas establecidos para el desarrollo del Sistema Aeropuerto Nacional.
También se hizo hincapié en que cinco días después de inicio de vigencia de la asignación, se tiene que notificar a la Agencia Federal de Aviación Civil el nombramiento del administrador aeroportuario.
Además, se indicó que la vigencia del título de asignación es por tiempo indefinido y sólo concluirá cuando se acredite que ya no existe causa de utilidad pública, interés público, general o social que salvaguardar, así como razones de seguridad nacional que la justifique.
No hay que olvidar que, durante la conferencia presidencial del 28 de junio, el presidente del país explicó que le quitaría el control de diversas terminales aéreas, entre ellos el de Puebla, a la empresa paraestatal.
Añadió que ASA no desaparecerá, ya que subsistirá como entidad normativa. Por lo tanto, el anuncio se hizo efectivo este día.
Incluso, mencionó que dejar el control de los aeropuertos en manos de dicha, Secretaría, se debe que se busca frenar el contrabando de droga, así como el robo de equipaje, entre otros delitos.
Cabe mencionar que en primera instancia, el Gobierno de México en octubre del año 2000 otorgó una concesión por 50 años del aeródromo a la empresa Operadora Estatal de Aeropuertos, a cargo de Ricardo Henaine.
Sin embargo, en noviembre de 2011, el entonces gobernador del estado Rafael Moreno Valle Rosas decretó la disolución de la empresa y ordenó su liquidación en términos de la Ley de Entidades Paraestatales del Estado, por lo que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes tuvo la facultad de intervenir y con ello, mediante la Dirección General de Aeronáutica Civil, asumir la administración hasta que el gobierno federal otorgara una concesión.
Fue hasta 2014 cuando se otorgó el titulo de concesión al Organismo Público Descentralizado del Gobierno de México denominado Aeropuerto y Servicios Auxiliares (ASA) para su administración.