Cuando Vince Gillian y Peter Gould trabajaban en “Breaking bad”, solían bromear con la idea de un spin-off centrado en “Saul Goodman”, el peculiar abogado de la serie, cuya personalidad los dejó con ganas de saber más sobre su vida.
Así nació “Better call Saul”, una precuela que abunda en el pasado del personaje, así como en los orígenes del conflicto entre el cartel de los “Salamanca” y “Gustavo Fring” (Giancarlo Esposito), dos de los principales antagonistas de la producción original.
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“La idea de hacer otro show después de “Breaking bad”, en el mismo universo y con los mismos actores, parecía muy lindo para ser verdad, pero aquí estamos”, comentó Peter en una entrevista otorgada a un medio estadounidense, a unos meses del estreno de este proyecto.
El periodista especializado en cine y televisión, Stivi de Tivi, explicó a El Sol de México que dada la naturaleza turbia del protagonista, además de ofrecer al público una historia que abunda en el universo ya cimentado por sus creadores en su secuela, da un giro al tono de las serie de abogados.
“Cambia totalmente la jugada, porque estamos acostumbrados a ver el juicio, las peleas, lo que sucede cuando batallan con sus problemas familiares, y aquí es todo lo contrario”, comentó.
“Es un profesional que fue rechazado por las dos partes, y cómo debe levantarse por sí solo, y la manera de hacerlo es la mala, y cómo empieza este lado a impregnar a quienes lo rodean”.
Desde el estreno de su primera temporada en 2015, La crítica de inmediato la volteó a ver, gracias al trabajo actoral y la fotografía, valiéndole una calificación del 98 por ciento en el portal especializado “Rotten Tomatoes”.
Asimismo ha competido por distintos galardones, entre las que destacan dos candidaturas a Globos de Oro y 46 nominaciones a los premios Emmy (siete de ellas con esta última temporada en 2022, incluyendo Mejor Actor y Actriz, para Bob Odenkirk y Rhea Seehorn -“Kim Wexler” en la serie-).
Para el protagonista el éxito de este proyecto sigue siendo complicado de digerir, pues no esperaba que en este punto de su carrera (la cual inició en 1987, en “Saturday night live”).
“Es difìcil de creer, pasé tantos años como escritor de comedia, y haciendo trabajo que disfruto mucho, y eso fue muy gratificante. Y después viene todo este reconocimiento, el cariño de la gente ve el programa, no puedo creer lo cercano que el público lo siente”, expresó durante su visita a un matutino estadounidense.
Ahora que el final se acerca, afirmó sentir nostalgia por despedirse de “Saul”, pues opina que es un papel que mezcla la comedia con el drama de una manera muy balanceada, y pocos actores tendrán la oportunidad de hacer.
A su vista al “late night” de Stephen Colbert, declaró que “fueron seis años de “Better call Saul” y alrededor de cuatro con “Breaking Bad”. He interpretado a este personaje”, “Entré a este negocio para hacer una variedad de cosas, y el drama fue una sorpresa para mí”.
Stivi aplaudió el trabajo, no sólo de Odenkirk, sino del resto del elenco y guionistas, pues en su opinión lograron construir una trama sólida, que se sostiene con nada más que una buena labor actoral y con líneas contundentes.
“Es una serie muy intensa donde casi no hay acción, en todas las temporadas hay sólo como cinco o seis episodios que tienen este elemento, los demás son diálogos muy intensos. Eso es lo que la diferencia de la anterior, aquí son todo diálogos y actuación”.
“Better call Saul” cuenta también con las actuaciones de Tony Dalton, Jonathan Banks, Michael Mando y Patrick Fabian. Todas las temporadas están disponibles en la plataforma Netflix.