Una dura confesión fue la que realizó Lina María Hurtado, la representante de la ciudad de Buenaventura que logró llegar a la final de Miss Universe Colombia, al asegurar que llegó a usar cloro en un intento para poder blanquear su piel y así fue como narró esta cruda etapa de su vida.
Fue el pasado 2 de septiembre cuando se realizó una edición más del famoso certamen de belleza, en el cual Miss Buenaventura era una de las favoritas, sin embargo, no figuró como la ganadora de la corona, pues quedó atrás de Camila Avella, quien fue nombrada como reina de la edición 2023, motivo por el cual muchos usuarios en redes sociales expresaron su decepción.
A pesar de que Lina María no se coronó como Miss Universe Colombia, se llevó todos los elogios por su belleza y naturalidad, además de que su nombre ha seguido llamando la atención en los medios de comunicación por la revelación que recientemente realizó, al vivir en carne propia el racismo y el bullying.
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Modelo usó cloro para blanquear su piel: “Lo hacía a escondidas de mis padres”
Lina María Hurtado Mosquera es una modelo de 24 años de edad que estudió comunicación social, con un enfoque en el cambio social, una mujer que aparte de trabajar en la industria del modelaje y ser artista profesional, es docente de comunicación para la paz y pedagoga contra el racismo en diferentes áreas remotas y de difícil acceso en el país.
El pasado sábado, Hurtado representó a la ciudad de Buenaventura durante el certamen de belleza Miss Universe Colombia 2023 y llegó a la final del concurso; a pesar de que era una de las favoritas, no ganó la corona, pero fue nombrada como primera princesa.
Pero más allá de su belleza, su labor en contra del racismo y la controversia que se generó en la internet por no haber ganado el concurso de belleza, el nombre de Miss Buenaventura ha dado la vuelta al mundo por una dura confesión que realizó sobre una experiencia vivida durante su infancia.
De acuerdo a una entrevista con la revista Semana, la modelo compartió el fuerte caso de bullying y racismo que vivió en el colegio por parte de sus compañeros, quienes se burlaban de su color de piel: “Mis papás trataron en lo posible de mostrarme lo valioso que era ser una mujer negra, de cuánto me tenía que amar y aceptarme. Pero los niños eran crueles y había bullying, y me costaba aceptarme tal y como era”, comentó.
En este sentido declaró que su tono de piel era una de sus mayores inseguridades: “Siempre llegaba del colegio con ganas de arrancarme la piel y fue un proceso difícil. Y poco a poco fui haciendo la transición de entenderme, amarme, quererme y tratar de comprender lo que es el racismo estructural”, añadió.
Por tal motivo, compartió una cruda etapa de su vida cuando era joven, ya que en varias ocasiones intentó aclarar su piel, al punto que llegaba en las tardes a su casa y se aplicaba cloro para intentar blanquearla: “Lo hacía a escondidas de mis padres. Y lo usaba porque se supone que es un blanqueador y lo blanco era lo bueno. Siendo niña y en medio de lo ilógico que podía ser me lo aplicaba y me frotaba. Y me hice mucho daño en la piel”, confesó.
Gracias a los momentos difíciles que vivió durante su niñez, a causa del bullying que vivió durante su infancia, Miss Buenaventura se ha convertido en una abanderada en contra del racismo y ahora se dedica a reivindicar el verdadero valor de su raza en la sociedad.
“Muchas niñas me dicen que incluso se han enfermado por hacer esas cosas. Es algo que sigue pasando. Ahora mismo estoy iniciando con mi marca de productos para el cuidado de la piel y el cuerpo, para inspirar a otras niñas y que haya una resignificación de quiénes somos”, concretó.