/ domingo 12 de diciembre de 2021

Vicente Fernández fallece a los 81 años

Conocido como el Charro de Huentitán comenzó su carrera en el medio artístico en 1964

Vicente Fernández considerado por el público como el máximo exponente de la música ranchera, falleció a los 81 años después de varias complicaciones por una enfermedad degenerativa.

Su estilo y porte lo convirtieron en uno de los prototipos de como debe lucir el charro mexicano y, al ser originario del pueblo de Huentitán El Alto, Jalisco, esto dio paso a su más conocido apodo: el Charro de Huentitán. Deja una familia de talentosos músicos y productores que seguirán su legado como parte de la música y del regional mexicano.

LA COMPLICADA SALUD DE VICENTE FERNÁNDEZ

El cantante y actor fue internado en el hospital desde el seis de agosto cuando sufrió una caída en su rancho “Los Tres Potrillos” en Jalisco. Esto le trajo varias complicaciones por lo que tuvo que ser sometido a una cirugía de cuello debido a la enfermedad degenerativa que padece, el síndrome de Guillain-Barré.

Este síndrome es una afección en la que el sistema inmunológico ataca a los nervios y que puede producirse por una infección bacteriana o viral aguda, por lo que no tuvo relación con caída. Se describe como un problema de salud que ocurre cuando el sistema inmunitario ataca parte del sistema nervioso periférico por error. Las posibilidades de sufrirlo aumentan con la edad y se desconoce la causa exacta de que lo provoca.

Dentro de sus síntomas, se presenta debilidad, hormigueo en las extremidades inferiores y en casos más graves puede presentar parálisis. Al cantante le trajo complicaciones principalmente respiratorias, por lo que se mantuvo la mayor parte del tiempo en terapia intensiva.

A lo largo de su vida, Vicente Fernández tuvo enfermedades complicadas como en el 2002 cuando superó el cáncer de próstata. En 2012 se informó que se le extirpó un tumor en el hígado y, al siguiente año, sufrió de una trombosis que le hizo perder la voz por un tiempo. En 2015 tuvo otra cirugía mayor cuando se trató de unas hernias abdominales.

LA CARRERA DEL CHARRO DE MÉXICO

Su vida estuvo ligada a los escenarios como al espectáculo desde muy joven, esto al comenzar desde 1964. Nació el 17 de febrero de 1940 en Huentitán El Alto, Jalisco, y, apenas con 14 años tuvo sus primeras aproximaciones a lo que sería su carrera al obtener el primer lugar en un concurso amateur de música.

Diversos restaurantes de la ciudad como la Plaza de los Mariachis se convirtieron en sus primeros escenarios. Para 1966 ya estaba bien posicionado al aparecer también en concursos de televisión, lo que le valió firmar su primer contrato discográfico con lo que hoy es Sony Music. En el material estuvieron algunos de sus primeros éxitos como “Perdóname”, “Cantina del barrio”, así como “Tu camino y el mío”.

Siguieron otras producciones musicales como “Palabra del Rey” y “Ni en defensa propia”. Su carrera terminó por consolidarse al participar en varios segmentos musicales de la cadena Televisa y en los programas de Raúl Velasco, donde la gente lo identificó por el tema “Volver, volver”, que es uno de sus grandes clásicos.

La canción lo posicionó como uno de los mejores interpretes de la música ranchera al llegar su éxito a nivel internacionales con récords en ventas en varios países de América Latina, España y Estados Unidos, esto al comienzo de la década de 1970.

Junto al éxito musical, llegó su otra gran faceta, la de actor al debutar en el cine con la cinta “Uno y medio contra el mundo” de 1971. Siguió la producción “La ley del monte” de 1973 y en 1976 llegó su primer gran éxito taquillero “Volver, volver”, por lo que la canción lo acompañó en todos sentidos para su gran despegue.

Desde entonces siguió con sus apariciones en el cine y logró ser tanto el ranchero como en facetas más urbanas como vendedor de tacos o como el padre de familia. Junto a su hijo, Alejandro Fernández, tiene su segunda gran cinta por la que siempre es recordado “Mi querido viejo” de 1991, una que describe parte de sus dificultades por su ocupada carrera y el desafío que fue estar junto a su familia.

Del lado de la música sus canciones siguieron posicionándose, en el mercado mexicano la década de 1990 resultó en una de las más exitosas gracias a éxitos como “Qué de raro tiene”, “Lástima que seas ajena”, “Me voy a quitar de en medio”, “Mujeres Divinas”, entre otras.

Sus presentaciones musicales eran especiales para todos aquellos quienes lo pudieron observar, además por su regular frase de “mientras ustedes aplaudan, yo sigo cantando”, con largos conciertos que siempre lograban mantener cautiva a la audiencia.

Para 2012 comenzó a mostrar sus intenciones de retirarse de las presentaciones en vivo debido a complicaciones de salud y al iniciar su gira de despedida. Esto no terminó por darse hasta el 16 de abril de 2016 con un concierto final en el Estadio Azteca, uno más que recordado al interpretar 45 canciones de su larga lista de éxitos.

De la música nunca tuvo un retiro oficial, ya que siguió en las producciones musicales y de discos, la última de ellas “Más romántico que nunca”, material discográfico que salió en 2018.

Dentro de su gran lista de logros destacan algunos como el Premio Billboard al Salón de la Fama, Persona del Año de la Academia Latina de la Grabación en 2012, su propia Estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, así como diversos galardones de los Grammy, Premios lo Nuestro y más.

Junto a su hijo Alejandro en su concierto de despedida en el Estadio Azteca. Foto: Cuartoscuro

SU VIDA PERSONAL Y SU LEGADO

Respecto a su vida personal, solo tuvo un gran amor en su vida, María del Refugio Abarca Villaseñor, a quien se le conoce como “Cuquita”. Se conocieron al ser vecinos en Guadalajara y decidieron casarse el 27 de diciembre de 1963, mismo año en el que falleció de cáncer la madre de Vicente.

Son tres hijos los que tuvo la pareja, todos ellos hombres que son: Alejandro, Vicente Jr y Gerardo. Una cuarta hija se unió a la familia por medio de la adopción al ser hija de una cuñada de él, a quien nombró Alejandra.

Alejandro Fernández se convirtió en el sucesor de la música de Vicente Fernández al construir desde adolescente una exitosa carrera. Al principio siguió los pasos de su padre y sus primeras oportunidades llegaron gracias a él. Para la década de los 90 decidió formar su propio camino para conseguir su propia voz y estilo que terminaron por consolidarlo como uno de los más importantes cantantes de los últimos años.

Vicente Fernández considerado por el público como el máximo exponente de la música ranchera, falleció a los 81 años después de varias complicaciones por una enfermedad degenerativa.

Su estilo y porte lo convirtieron en uno de los prototipos de como debe lucir el charro mexicano y, al ser originario del pueblo de Huentitán El Alto, Jalisco, esto dio paso a su más conocido apodo: el Charro de Huentitán. Deja una familia de talentosos músicos y productores que seguirán su legado como parte de la música y del regional mexicano.

LA COMPLICADA SALUD DE VICENTE FERNÁNDEZ

El cantante y actor fue internado en el hospital desde el seis de agosto cuando sufrió una caída en su rancho “Los Tres Potrillos” en Jalisco. Esto le trajo varias complicaciones por lo que tuvo que ser sometido a una cirugía de cuello debido a la enfermedad degenerativa que padece, el síndrome de Guillain-Barré.

Este síndrome es una afección en la que el sistema inmunológico ataca a los nervios y que puede producirse por una infección bacteriana o viral aguda, por lo que no tuvo relación con caída. Se describe como un problema de salud que ocurre cuando el sistema inmunitario ataca parte del sistema nervioso periférico por error. Las posibilidades de sufrirlo aumentan con la edad y se desconoce la causa exacta de que lo provoca.

Dentro de sus síntomas, se presenta debilidad, hormigueo en las extremidades inferiores y en casos más graves puede presentar parálisis. Al cantante le trajo complicaciones principalmente respiratorias, por lo que se mantuvo la mayor parte del tiempo en terapia intensiva.

A lo largo de su vida, Vicente Fernández tuvo enfermedades complicadas como en el 2002 cuando superó el cáncer de próstata. En 2012 se informó que se le extirpó un tumor en el hígado y, al siguiente año, sufrió de una trombosis que le hizo perder la voz por un tiempo. En 2015 tuvo otra cirugía mayor cuando se trató de unas hernias abdominales.

LA CARRERA DEL CHARRO DE MÉXICO

Su vida estuvo ligada a los escenarios como al espectáculo desde muy joven, esto al comenzar desde 1964. Nació el 17 de febrero de 1940 en Huentitán El Alto, Jalisco, y, apenas con 14 años tuvo sus primeras aproximaciones a lo que sería su carrera al obtener el primer lugar en un concurso amateur de música.

Diversos restaurantes de la ciudad como la Plaza de los Mariachis se convirtieron en sus primeros escenarios. Para 1966 ya estaba bien posicionado al aparecer también en concursos de televisión, lo que le valió firmar su primer contrato discográfico con lo que hoy es Sony Music. En el material estuvieron algunos de sus primeros éxitos como “Perdóname”, “Cantina del barrio”, así como “Tu camino y el mío”.

Siguieron otras producciones musicales como “Palabra del Rey” y “Ni en defensa propia”. Su carrera terminó por consolidarse al participar en varios segmentos musicales de la cadena Televisa y en los programas de Raúl Velasco, donde la gente lo identificó por el tema “Volver, volver”, que es uno de sus grandes clásicos.

La canción lo posicionó como uno de los mejores interpretes de la música ranchera al llegar su éxito a nivel internacionales con récords en ventas en varios países de América Latina, España y Estados Unidos, esto al comienzo de la década de 1970.

Junto al éxito musical, llegó su otra gran faceta, la de actor al debutar en el cine con la cinta “Uno y medio contra el mundo” de 1971. Siguió la producción “La ley del monte” de 1973 y en 1976 llegó su primer gran éxito taquillero “Volver, volver”, por lo que la canción lo acompañó en todos sentidos para su gran despegue.

Desde entonces siguió con sus apariciones en el cine y logró ser tanto el ranchero como en facetas más urbanas como vendedor de tacos o como el padre de familia. Junto a su hijo, Alejandro Fernández, tiene su segunda gran cinta por la que siempre es recordado “Mi querido viejo” de 1991, una que describe parte de sus dificultades por su ocupada carrera y el desafío que fue estar junto a su familia.

Del lado de la música sus canciones siguieron posicionándose, en el mercado mexicano la década de 1990 resultó en una de las más exitosas gracias a éxitos como “Qué de raro tiene”, “Lástima que seas ajena”, “Me voy a quitar de en medio”, “Mujeres Divinas”, entre otras.

Sus presentaciones musicales eran especiales para todos aquellos quienes lo pudieron observar, además por su regular frase de “mientras ustedes aplaudan, yo sigo cantando”, con largos conciertos que siempre lograban mantener cautiva a la audiencia.

Para 2012 comenzó a mostrar sus intenciones de retirarse de las presentaciones en vivo debido a complicaciones de salud y al iniciar su gira de despedida. Esto no terminó por darse hasta el 16 de abril de 2016 con un concierto final en el Estadio Azteca, uno más que recordado al interpretar 45 canciones de su larga lista de éxitos.

De la música nunca tuvo un retiro oficial, ya que siguió en las producciones musicales y de discos, la última de ellas “Más romántico que nunca”, material discográfico que salió en 2018.

Dentro de su gran lista de logros destacan algunos como el Premio Billboard al Salón de la Fama, Persona del Año de la Academia Latina de la Grabación en 2012, su propia Estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, así como diversos galardones de los Grammy, Premios lo Nuestro y más.

Junto a su hijo Alejandro en su concierto de despedida en el Estadio Azteca. Foto: Cuartoscuro

SU VIDA PERSONAL Y SU LEGADO

Respecto a su vida personal, solo tuvo un gran amor en su vida, María del Refugio Abarca Villaseñor, a quien se le conoce como “Cuquita”. Se conocieron al ser vecinos en Guadalajara y decidieron casarse el 27 de diciembre de 1963, mismo año en el que falleció de cáncer la madre de Vicente.

Son tres hijos los que tuvo la pareja, todos ellos hombres que son: Alejandro, Vicente Jr y Gerardo. Una cuarta hija se unió a la familia por medio de la adopción al ser hija de una cuñada de él, a quien nombró Alejandra.

Alejandro Fernández se convirtió en el sucesor de la música de Vicente Fernández al construir desde adolescente una exitosa carrera. Al principio siguió los pasos de su padre y sus primeras oportunidades llegaron gracias a él. Para la década de los 90 decidió formar su propio camino para conseguir su propia voz y estilo que terminaron por consolidarlo como uno de los más importantes cantantes de los últimos años.

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