En un abrir y cerrar de ojos el esfuerzo de ocho años realizado por más de 100 mujeres de la Asociación Mujer Hacia un Futuro en Azumiatla, colectiva encargada de empoderarlas, desapareció casi por completo al ser víctimas de robo, por lo que su presidenta, Lourdes Gámez solicitó apoyo de las autoridades municipales y locales para volver a operar.
Computadoras, máquinas de coser, televisión, bolsas de ropa, juguetes, cables de luz, lámparas, tinaco y un tanque de gas, fueron algunos de los artículos que robaron en las instalaciones de la organización el pasado fin de semana, mismos que servían como herramienta de trabajo para las mujeres, niñas y niños que reciben talleres para mejorar su desarrollo y poder tener un mejor futuro.
A decir de la titular de la Asociación, fue el 11 de septiembre del año en curso cuando se percataron que una de las ventanas del inmueble estaba rota, por lo que inmediatamente recorrieron las instalaciones y dieron cuenta de la falta de cableado, y demás enseres con un valor de 50 mil pesos. “Se robaron todo lo que te puedas imaginar, sacaron todo, pero nos limpiamos las lágrimas y otra vez a tocar puertas, pedir apoyos y a seguir trabajando”, dijo Lourdes Gámez.
Ante este panorama, las afectadas hacen un llamado a las autoridades municipales y estatales para que puedan apoyarlas económicamente, así como en especie para poder dotarse una vez más de los instrumentos hurtados y continuar con el objetivo de la organización que es volver económicamente autosuficiente a la mujer y por ende tener un mejor futuro.
Uno de los talleres que se vio más afectado con la sustracción fue el de corte y confección, pues se robaron las tres máquinas de coser con las que se contaban, así como telas y demás elementos para el bordado; la radio comunitaria que apenas comenzaba a tomar forma permanecerá en pausa unos días más, pues la computadora y televisores que servirían para este proyecto también fueron sustraídos.
Subrayó que la adquisición del equipo de trabajo se da a través de los años por medio de donaciones, ahorros, rifas con causa, así como del trabajo de las mujeres de la comunidad, por lo que, desde su perspectiva, llevará más de un año el poder recuperar lo perdido. “Se llevaron lo que se podrían vender allá afuera, puede ser vandalismo o un golpe bajo que nos quieren hacer como mujeres de que estamos rescatando este centro cultural (…) 50 mil pesos significan para nosotras trabajo y esfuerzo”.
El centro cultural y del bienestar ubicada en el corazón del municipio de Azumiatla apoya a los grupos vulnerables en salud psicológica, nutricional, jurídicos, entre otros, además de impartir capacitación en estilismo; costura, bordado, corte y confección; cocina comunitaria y huertos y hortalizas.
