La intensa tormenta de la tarde-noche de ayer en la capital poblana dejó como saldo al menos 12 vehículos afectados, vialidades inundadas, además de la caída de árboles y el desbordamiento del río en Avenida Nacional.
En menos de una hora, el aguacero generó estragos también en plazas comerciales, inundando locales, al igual que la zona de gimnasios y la alberca en el Parque Ecológico, mientras que el área de bebés del Hospital de la Mujer presentó filtraciones.
Personal de Protección Civil Municipal puso en marcha el Operativo “Acuario”, contando con el apoyo del departamento de bomberos y de la empresa Agua de Puebla para Todos, instalando motobombas y desazolvando alcantarillas para el flujo rápido del agua.
Las vialidades afectadas fueron Bulevar 5 de Mayo, parte del Circuito Juan Pablo II, Avenida Margaritas y Nacional, así como 24 Sur y Valsequillo, 10 Sur atrás del CENHCH, entre otros puntos.
A causa de la intensa lluvia, las alcantarillas resultaron insuficientes para captar la gran cantidad de agua, generando inundaciones en estos puntos, ocasionando que algunos automóviles quedaran varados.
Uno de los puntos con mayor grado de afectación fue en Avenida Nacional y 57 Poniente, donde al menos seis unidades estacionadas prácticamente fueron cubiertas por el desbordamiento del río.
De acuerdo con testimonios de los afectados, señalaron que en cuestión de minutos el agua alcanzó una altura hasta de dos metros, sin dar oportunidad de mover los vehículos. El paso vehicular fue cerrado por precaución, mientras las aseguradoras levantaban sus reportes para analizar si aplicaba la cobertura por “daños de la naturaleza”.
Otros más externaron su preocupación por el gasto a realizar al explicar que no cuentan con seguro vehicular.
La precipitación, que estuvo acompañada por momentos de ráfagas de viento, dejó al menos tres árboles caídos en los siguientes puntos: 25 Sur y 37 Poniente, Bulevar 5 de mayo y 5 Sur, así como en la calle segunda de Benito Juárez y Privada del Trabajo en la colonia Los Ángeles Barranca Honda, lugar donde se fue temporalmente la luz porque algunas ramas cayeron sobre los cables de alta tensión.