Ana María Vázquez Rentería fue una de las tantas docentes queayer estuvo afuera de la otrora Normal Superior del Estado dePuebla, entonando el himno, a manera de homenaje a una instituciónque cerrará sus puertas debido a los daños que presenta por elsismo del martes 19 de septiembre.
El edificio ubicado en la 11 Sur 1102, que hace unos díasfungía como la Escuela Héroes de la Reforma, fue visitado pordecenas de alumnos y exalumnos, quienes lanzaron globos y colocaronofrendas florales debido a las víctimas mortales que cobró elsismo de la semana pasada.
Algunos asistentes pidieron que el lugar no sea demolido, puesles representa vivencias y recuerdos, como sus maestros, su primeramor, a sus amigos entrañables y la pasión por la decencia.
No obstante, personas como la maestra Ana María, consideraronque la instalación no puede usarse como escuela porque siempre harepresentado un peligro para los ocupantes, toda vez que siempre seha cimbrado el segundo piso.
Ella estudió allí, además de que durante 25 años fungiócomo docente de la institución. “Estoy triste pero a la vez muycontenta porque el edificio no se va a demoler, solamente lo van aestructurar pero ya no puede ser escuela nuevamente (…) lavenimos a ver porque está herida. La amamos mucho”,dijo.
La docente explicó que desde el sismo de 1999 la escuela quedóendeble y se planeaba un cambio de ubicación, aunque ello nunca sehizo. En el sismo reciente, hubo lesionados y muertos en estainstitución, provocados por la caída de material.
Desde antes de las 17:00 horas, los asistentes comenzaron acongregarse. Tras 20 minutos de espera, se trasladaron a lasafueras de la institución, es decir la 11 Sur. Ante ello,elementos de Tránsito Municipal decidieron cerrar la calle paraevitar que los presentes tuviesen algún accidente.
La emotividad no se hizo esperar, pues entre el tumulto, algunosmaestros formados en la institución, derramaron lágrimas.“Por los espaciosque alumbró la llama eterna del amor, por los senderos que rególa sangre noble del deber; por los caminos que marcó la huellahonda del dolor; vamos cantando nuestras infinitas ansias delsaber”, entonaron los asistentes. A uncostado del edificio, que tiene huellas del sismo, hay cartelonesque rezaron por Zoé y Amelia, personas que fallecieron alcaérseles material.
