Cansados de la delincuencia que azota a La Guadalupana, vecinos de esta unidad habitacional se están organizando y realizando rondines nocturnos desde hace dos semanas para ahuyentar a los maleantes y hacer la tarea que le correspondería a los gobiernos municipal y estatal. Se dicen dispuestos a tomar cualquier medida, incluso a linchar, para defender su patrimonio y la integridad de sus familias.
Esta colonia del sur de la ciudad de Puebla está sumergida en el abandono, pues además de la falta de seguridad, sus calles están plagadas de grafitis y los baches que comúnmente existen en cualquier vialidad se han convertido en cráteres de hasta un metro de profundidad.
La intención de agruparse para cuidar las calles de esta colonia nació desde hace dos años, no obstante, los vecinos la concretaron apenas hace dos semanas. En el primer rondín lograron detener y entregar a las autoridades a dos presuntos delincuentes que estaban asaltando a los automovilistas a la altura de la virgen de Guadalupe.
Los vecinos atribuyen esta situación de inseguridad a lo alejada que se encuentra del centro dicha unidad habitacional, la cual señalaron que está siendo invadida por bandas de colombianos y por paracaidistas al parecer antorchistas.
“De unos años para acá se ha convertido en un nido de ratas, como estamos alejados del centro todo mundo se viene a refugiar de este lado. Aquí han encontrado muchas casas de seguridad, mucha gente secuestrada, entonces los vecinos nos estamos organizando porque ya es estar viviendo en estas condiciones de inseguridad”, dijo uno de los colonos que prefirió mantenerse en el anonimato.
“A la 1 de la tarde te asaltan, a las 12 de la noche te asaltan, a todas horas hay asaltos, entonces ya no podemos estar tranquilos, ya no podemos llevar a los niños a la escuela”, agregó.
El número de vecinos que están participando en los rondines de La Guadalupana asciende a 40, no obstante, conforme avanza el tiempo se están sumando más colonos a esta iniciativa de seguridad.
Los recorridos no los hacen diariamente sino en diferentes días y en diferentes horarios para que los delincuentes no les “tomen la medida”. Los vecinos portan silbatos, cadenas y palos durante los rondines, mientras que otros aprovechan para sacar a pasear a sus perros.
“Nos estamos organizando para hacer lo que la policía y el gobierno no están haciendo: cuidarnos”, dijo el vecino de la Guadalupana, quien comentó que se tomó de ejemplo la unidad habitacional Bosques de San Sebastián para crear estas policías comunitarias.
Los colonos tienen identificados al menos tres focos rojos en esta zona, dos de los cuales se encuentran en los límites con la junta auxiliar San Francisco Totimehuacán.
Se quejaron de que las patrullas de policías municipales solamente realizan un recorrido al día a pesar de que conocen la situación delictiva. Denunciaron que los elementos de Seguridad han llegado hasta dos horas después del llamado de auxilio que se les hace.
EN EL OLVIDO LA UNIDAD HABITACIONAL
Además de la inseguridad, los vecinos se quejaron del pésimo estado en el que se encuentran las calles de la Guadalupana. Este medio de comunicación pudo constatar que no existen baches sino “cráteres” de hasta un metro de profundidad en esta unidad habitacional.
Consideraron que esta situación también está contribuyendo al incremento de la delincuencia, puesto que las calles más afectadas se están volviendo prácticamente intransitables, por lo que están solas, situación que es aprovechada por los maleantes para asaltar a los pocos que caminan y circulan por esas vialidades.
“Hay baches que tienen metro y medio de profundidad, por eso es que hay muchas calles que ya no son transitadas por lo mismo de sus condiciones, entonces como ya no son transitadas por los vehículos cada vez están más solas y se presta para que los delincuentes se escondan o estén cazando a los pocos que pasan”, dijo el vecino.
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Explicaron que el deterioro de las vialidades se debe, en parte, a que maquinaria del Ayuntamiento de Puebla transita por ellas para trasladar escombro y desperdicios de obras (tales como ballenas metálicas de obras) a las inmediaciones de una pequeña montaña que se encuentra en la zona, la cual forma parte de un predio propiedad del gobierno municipal.
Refirieron que hasta antes de las elecciones no tenían alumbrado público, convirtiendo a la unidad habitacional en una “boca de lobo”, lo cual cambió cuando los candidatos llegaron a pedir su voto antes del 1 de julio de este año.
ASÍ LUCEN LAS CALLES EN MAL ESTADO
Los vecinos también se quejaron de que al parecer integrantes de la agrupación Antorcha Campesina y grupos delincuenciales de Colombia se están apropiando de las viviendas que se encuentran vacías en la Guadalupana.
“Que sepan que nosotros como vecinos estamos organizados y estamos dispuestos a defender nuestro patrimonio, no es el afán de nosotros el salir a hacer justicia con nuestra propia mano pero si es necesario vamos a defender lo nuestro”, remató el vecino que participa en rondines y que prefirió mantener en el anonimato.
Fotos: Erik Guzmán
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