Ocho de los 103 conflictos mineros del país, tienen origen enel estado de Puebla, señala el Centro de Estudios Sociales y deOpinión Pública de la Cámara de Diputados (Cesop). La entidad seubica solo por debajo de Chihuahua y Zacatecas en cuanto a estosproblemas, sobre todo originados por la contaminación que generala industria extractiva y el consumo de agua que tiene.
Como parte de la publicación “Debate sobre grandesconsumidores de agua: el caso de las mineras en México”, elCesop precisa que en México hay 103 conflictos mineros en 24entidades del país. El estado con mayor cantidad de problemasrelacionados con la minería es Chihuahua, con 13 conflictos.
Esta información difiere con la versión del Observatorio deConflictos Mineros de América Latina (Ocmal), que recién indicóque Puebla estaba en la cima de los conflictos mineros del país,donde solo habría 37 casos y no 103, como apunta la Cámara deDiputados.
El estudio del Cesop indica que Zacatecas ocupa el segundo sitionacional en problemas relacionados con la minería (12), seguido dePuebla (8), Oaxaca (7), Chiapas (5), Michoacán (5), BajaCalifornia Sur (5), Sonora (5), San Luis Potosí (4), Durango (4),Guanajuato (4), Guerrero (4) y Colima (4).
El análisis abunda que el consumo de agua de la industriaminera es del tres por ciento a nivel nacional. Se señala que enel país, 436 millones 643 mil 278.92 metros cúbicos de agua alaño, son concesionados a las empresas mineras, lo que seríaequivalente a satisfacer el derecho humano al agua de 11.9 millonesde personas por un año.
Aunque Puebla es de las entidades con mayor cantidad deconflictos relacionados con el sector, el estudio resalta que loscasos en los que más notoria es la sobreexplotación de losacuíferos son el Valle de Ixtlahuacan, en Colima; Los Juncos, enChihuahua, Campo Mina, en Nuevo León; Villa Hidalgo, en San LuisPotosí; San Simón, en Baja California; y Guadalupe de lasCorrientes, Zacatecas.
Sin embargo, también en la región central del estado poblano,se tienen detectados acuíferos sobreexplotados.
El análisis dice que, contrario a la creencia, la inversión delas industrias mineras en las entidades, “no ha representadonecesariamente una mejora económica en las poblaciones marginadas.Más bien, parece que, al contrario, algunas veces son causantesdel deterioro en la vida de los pobladores”.
El efecto de las mineras en el suelo que tienen bajo concesión,implica que éste reciba aguas ácidas que tienen metales pesadosde mineralizaciones sulfuradas aflorantes, indica el Cesop. Ello,amén de que hay contaminación cuando la minería es a cieloabierto, pues hay afectación a los bosques, destrucción desuelos, contaminación del agua, despojo de tierras, daño a losmantos freáticos, inestabilidad de las capas geológicas, entreotros.
En el caso de Puebla, el Cesop señala las afectaciones al ríoApulco: “Los estudios técnicos presentados por la empresa yanalizados por un especialista en geoquímica indican una potencialcontaminación de las aguas superficiales y subterráneas pordrenaje ácido y por el almacenamiento de lixiviados de una presaubicada en la zona estratégica de la cuenca”.
Los tipos de conflictos generados por el establecimiento de lasmineras son impacto ambiental, relación inequitativa, despojo delterritorio, agua, seguridad, patrimonio, salud, minería ilegal yreubicación.
A nivel nacional, los estados que menos conflictos tienen,relacionados con la minería, son Baja California Norte, Nayarit,Morelos y Aguascalientes.
