A pesar de que la sentencia del juez federal obliga al Congreso del Estado a dejar sin efecto la inhabilitación que aprobó el año pasado contra el ex alcalde de Puebla, Eduardo Rivera Pérez, el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, Carlos Martínez Amador, se resistió a cumplir con la revocación de la sanción y dio carpetazo al caso con el argumento de que a los diputados ya nos les corresponde aprobar nada.
"No se tiene que sesionar, no se tiene que votar el quitarle una inhabilitación o no a Eduardo Rivera. Él impugnó un tema de procedimiento y ganó el tema de procedimiento y el Congreso ya no tendría nada que ver, no tendríamos por qué votar", comentó en entrevista.
Esto a pesar de que uno de los efectos de la sentencia del juez federal obliga al Congreso local a dejar insubsistente la resolución contra Eduardo Rivera y emitir una nueva declarando caduco el proceso impugnado.