Ya estaba listo lo que cada integrante de la familia iba a llevar a la cena para Navidad y Año Nuevo, estaba listo el intercambio de regalos y se sentían emocionados porque a diferencia del 2020 iban a estar reunidos. Sin embargo, los planes se cancelaron cuando uno de los integrantes dio positivo a coronavirus.
Este año, las fiestas fueron diferentes para las personas contagiadas de la Covid-19 -pero que no tuvieron que internarse- pues dejaron lo festejos a un lado y cenaron solos por el confinamiento. A continuación se relatarán sus historias.
Elizabeth Sánchez el año pasado no pudo estar con su familia porque “el miedo al coronavirus” era mayor; entre todos, decidieron pasar las fiestas por separado y “darse el abrazo” cuando llegara la vacuna o los contagios disminuyeran.
Fueron complicadas las fiestas del año pasado, porque ella, su esposo y sus dos hijos nunca habían pasado separados estos festejos. Lloraron mucho, se deprimieron al grado de ir con el psicólogo, pero librar al coronavirus era la principal meta, puntualmente porque Liz tiene comorbilidades.
Todo cambió para este año, pues ya todos estaban vacunados y durante todo este tiempo ningún familiar se había contagiado de coronavirus, no obstante, el 20 de diciembre Liz se empezó a sentir mal, acudió a hacerse una prueba y lamentablemente salió positivo.
“Me sentí rara, tenía todos los síntomas, rogué para que no fuera esa enfermedad, pero al ir a sacarme la prueba efectivamente era eso. Me puse muy triste porque sentí que arruiné la Navidad y Año Nuevo de mi familia y para no contagiarlos decidí aislarme. Puedo respirar bien y por ello, el médico me pidió sólo estar en mi casa y no hubo necesidad de ir al hospital”, compartió.
Lo anterior hizo que el esposo de Liz se fuera a la casa de sus hijos y por respeto y cariño a ella, todos decidieron no festejar este año y esperarse hasta que ella pasara la cuarentena.
En la casa de Liz se sintió la tristeza, pues ella pasó sola las fiestas, pasó de su cuarto a la cocina y se imaginó todo el tiempo el “cómo hubiera sido” si no se hubiera contagiado.
En su cocina se vieron los planes rotos, se quedó toda la pasta que iban a preparar en sus bolsas, la pierna que iban a comer tuvo que prepararla para comer sola y tuvo que calentar en el microondas la comida que tenía rezagada de los días pasados para que no se desperdiciara.
Hizo toda la pierna que tenían prevista para la cena y su convivio se resumió en ver la tele sola y comer llorando por la tristeza de no estar con la gente que ama. Pese a todo esto, sabe que es mejor aislarse que contagiar a los que ama.
“Me deprimí mucho, mis hijos me llamaron y trataron de que me alegrara por el teléfono, pero la realidad es que fue complicado porque como mexicanos estamos acostumbrados estos días pasarlos en familia”.
Lo mismo ocurrió con José León, pues días previos a la Navidad se enteró que estaba contagiado de coronavirus. Si bien, se alegró de que no requirió ser internado ni ocupó oxígeno, se entristeció cuando supo que por él todos los planes de su familia cambiaron.
El año pasado no pudieron reunirse debido a que tienen muchos familiares de la tercera edad y temían que si se juntaban varios de ellos se contagiarían de esta enfermedad.
Optaron por pasar en el 2020 sus festividades solos y creyeron que esto no se replicaría en el 2021. Pero la historia se volvió a repetir y José tuvo que pasar solo en esta temporada.
“El año pasado la pandemia estaba a todo lo que da y preferimos no juntarnos para no arriesgarnos. Este año iba a ser diferente, pero la enfermedad llegó a nuestra casa”.
Para no darle molestias a su familia José tuvo que pedir su cena a través de plataformas de comida rápida. La vajilla elegante quedó atrás y su cena fue en platos desechables mientras veía a sus familiares a través de videollamadas.
Cuando terminó su cena, estuvo un rato en el árbol de navidad, reflexionando y hasta llorando; extrañó a su familia, pero sabe que fue la mejor decisión.
Ni siquiera se arregló, pues lo sintió innecesario. Con su gorra, pantalón de mezclilla y con su comida japonesa pasó la navidad y recibió el tan esperado 2022.
“Fue complicado pasar estas fechas solo, pero estoy agradecido que no haya sido Ómicron que es de lo que se están enfermando todos. Es triste y un poco deprimente pasar estos días así, pero es mejor pasar solo que enfermar a tus seres queridos”, dijo.
DEPRESIÓN AUMENTÓ POR FESTEJOS DECEMBRINOS Y PANDEMIA
Hay que mencionar que con la llegada de diciembre la depresión fue al alza, así lo confirmaron las autoridades estatales de Puebla, quienes indicaron que la somnolencia, cansancio y marcados episodios de tristeza fueron parte de los síntomas que caracterizaron la depresión estacional.
A inicio de diciembre, el secretario de salud, José Antonio Martínez García, mencionó que este tipo de depresión se hacía presente en esta temporada invernal y se lo adjudicó a la soledad y hasta el clima.
Hay que destacar que este tipo de depresión afectó más a las personas que pasaron solas estas dos fechas, pues usualmente suelen relacionarlas con la familia y la unión de los seres queridos.
Por lo antes mencionado, la Secretaría de Salud habilitó un número telefónico para atender a los poblanos que presentaron algunos síntomas de este padecimiento.
En dicha línea, brindaron asesoría y orientación para evitar una situación de riesgo.
PANDEMIA AÚN NO HA TERMINADO, AUTORIDADES PIDEN SEGUIRSE CUIDANDO
El 30 de diciembre la Secretaría de Salud estatal informó que el comportamiento del virus SARS-CoV-2 entre la población mantenía una tendencia ascendente, con una positividad del 13.6 por ciento, por lo que pidieron extremar las medidas preventivas como lavado de manos, uso de cubrebocas, mantener la distancia aun en espacios abiertos, así como acudir de manera temprana a atención médica cuando haya síntomas.
Al cierre del 29 de diciembre registraron 208 mil 660 muestras procesadas con 123 mil 487 resultados positivos acumulados. Además de 186 nuevos contagios del 24 de diciembre al 29 de diciembre, así como ocho defunciones.
Hasta el momento, 209 municipios han registrado al menos un caso de infección, de los cuales actualmente se reportan 16 con casos activos, mientras que en solo ocho demarcaciones ningún caso con la enfermedad.
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