Integrantes del comité de padres de familia de la Escuela Primaria General Miguel C. turno matutino, exigen desde meses atrás a la Secretaría de Educación Pública (SEP), la destitución de la supervisora, Gabriela A., por presunto abuso de poder y golpear a los estudiantes. Ante la falta de respuesta de la dependencia estatal, amagan con encabezar una protesta afuera de la institución, ubicada cerca de la zona de los Fuertes de Loreto y Guadalupe de la ciudad de Puebla.
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En entrevista con El Sol de Puebla, algunos de los afectados, quienes prefirieron mantener su identidad privada por miedo a las represalias contra sus hijos, indicaron que, en varias ocasiones, la supervisora ha irrumpido a los docentes a media clase, para regañarlos o gritarles sin motivo alguno.
En una de esas visitas, presuntamente golpeó físicamente a un menor de edad de sexto grado, quien tomaba clases cono normalmente lo hace. Para la madre del niño, está situación es inaceptable porque en lugar de que la escuela sea un lugar seguro para su hijo, la supervisora lo agredió, y quiere que la cambien de zona, porque no está tranquila al saber que puede repetirse la situación.
Por los modos que maneja, cuando irrumpe en clases espanta a los menores de edad, quienes les han contado a sus padres de familia la situación que se repite desde semanas atrás y, de acuerdo con los padres, incrementa de gravedad, porque en las últimas ocasiones la supervisora, Gabriela A. entró a un salón de clases con dos personas que no se identificaron y aparentemente la cuidaban.
Desafortunadamente le tocó un mal momento a mi hija, cuando la supervisora vino a amedrentar con personas que no se identifican, ni sabemos quiénes eran las personas con las que venían, qué querían expuso un padre.
A lo anterior se suma la supuesta toma de fotografías a los menores, sin autorización de los padres, y con desconocimiento de para qué será usado el material.
Amenazas se han trasladado a personal de la escuela de parte de la supervisora
Aunque los padres de familia han buscado entablar diálogo con la supervisora, para cuestionar los motivos por los qué lleva a cabo dichas prácticas, no han obtenido ninguna respuesta, inclusivo, argumentan que tiene actitudes groseras con ellos, o simplemente los ignora.
De acuerdo con los afectados, la mujer dedicada a la docencia amenazó a la maestra de sexto grado turno matutino y al director, con quitarlos del puesto, sin ningún motivo. Esta situación molesta a los padres porque ambos son buenos en su trabajo y comprenden a los padres, así que, varios de ellos han tenido buenas acciones de su parte.
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En junio de este año, los padres presentaron un oficio ante la SEP para formalizar su petición de destitución de la supervisora, y hasta la publicación de este texto no existe ninguna respuesta, por lo que se organizan para hacer una protesta pacífica que obligue a las autoridades a escucharlos.