La presidenta municipal, Claudia Rivera Vivanco, descartó que vaya a dejar el cargo por petición del diputado local del PAN, Oswaldo Jiménez López, toda vez que los cargos de elección popular son irrenunciables y en el caso de la inseguridad que registra la ciudad, afirmó que fue “herencia maldita” de anteriores ayuntamientos panistas.
Sostuvo que está concentrada en trabajar para dar resultados que serán mejores con la suma de esfuerzos de los gobiernos federal y estatal.
La alcaldesa se dijo respetuosa de revocación de mandato que presentó este lunes el legislador local en el Congreso local, sin caer en distracciones y solucionar temas que le fueron heredados como el combate a la delincuencia.
Rivera Vivanco pidió tener memoria y recordar que la capital poblana le fueron retirados dos mil policías municipales entre 2011 y 2013 por decisión del gobierno estatal de ese entonces, encabezado por Rafael Moreno Valle Rosas, lo cual generó una crisis de inseguridad.
“Desde el 15 de octubre -2018- asumí la responsabilidad de dar resultados y dar la cara a este problema, vamos a hacer sinergia a través de este bloque de unidad para dar resultados a cargo del gobierno del estado, federación y municipios”.
La presidenta municipal se dijo tranquila de la petición hecha por el diputado Oswaldo Jiménez al igual de versiones que apuntan a su separación de cargo, por falta de resultados, para la llegada de la regidora con licencia, Rosa Márquez, "sería darse un balazo en el pie para Morena".
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