Tras la reciente iniciativa presentada ante el Congreso del Estado que pretende legalizar la interrupción del embarazo hasta las 12 semanas de gestación en la entidad, la Arquidiócesis poblana expresó su rechazo al argumentar que esta "violenta el derecho fundamental de la vida, los valores y derechos sobre los que se construye cualquier sociedad".
A través de un comunicado oficial, la institución eclesiástica mencionó que científicamente el embrión ya era un individuo humano, pues desde su fecundación se constituía como un ser biológicamente nuevo y distinto con un genoma propio.
"Es justamente su ADN, único y singular, lo que compone el patrimonio genético del nuevo individuo humano", agregó.
Ante lo mencionado, concluyó que esta vida era humana desde antes de las 12 semanas de gestación, por lo que debía ser privilegiado su derecho a vivir, tal y como lo establecen los tratados internacionales.
Asimismo, añadió que el aborto se estaba tomando como un problema de salud pública o una enfermedad, sin embargo, enfatizó que el embarazo no era un padecimiento.
En cuanto a los médicos, insistió que su labor estaba encaminada a salvar y procurar la vida y la salud, no a su destrucción ni deterioro.
Recalcó que la interrupción del embarazo no era segura ni en los lugares donde actualmente es legal, puesto que existía la evidencia de complicaciones, daños temporales o permanentes en el cuerpo femenino e incluso muertes.
Finalmente recomendó apostar en la prevención y en otras opciones antes de optar por acabar con la vida de un hijo propio.
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"Superemos la cultura de la muerte. Para ello es importante reconocer que hay opciones antes de pensar en eliminar la vida del propio hijo, como la adopción en el seno de una familia sana, integrada y equilibrada", recordó.
