La pandemia por Covid-19 ha afectado todos los rubros laborales, incluidos a quienes no tienen un salario fijo, como es el caso de trabajadores que se dedican a cargar y descargar camiones en la Central de Abasto, mejor conocidos como diableros.
Cabe señalar que este nombre lo toman de su principal instrumento de trabajo: el diablo, conocido así porque las manijas con las que se manipula se asemejan a unos cuernos.
Desde las tres de la mañana estos trabajadores comienzan sus labores en la Nave C de este gran centro de compra-venta de alimentos, donde laboran durante varias horas.
La labor que realizan estos hombres es considerada una de las más pesadas de la Central de Abasto, por el gran esfuerzo físico que representa el traslado, así como la carga y descarga de diversos productos.
Los trabajadores aseguran que la afluencia de compradores ha disminuido desde hace varios meses a consecuencia de la contingencia sanitaria, lo que se ha traducido en una reducción de sus ingresos.
Pese a que el trabajo escasea, no pierden el ánimo y acuden todos los días a laborar para poder llevar, aunque sea mínimo, el sustento a sus familias.
