Puebla se mantiene entre los estados con mayor nivel de religiosidad, ya que hasta el 90 por ciento de la población está inmersa en el catolicismo, y aunque el mayor desprestigio de la iglesia proviene de los casos de pederastia, no se han denunciado incidentes en la última década, expresó el arzobispo, Víctor Sánchez Espinosa.
“Puebla es una ciudad muy religiosa, nos ha afectado la crisis por la que ha pasado la iglesia con el tema de los abusos pero es un tema que solo la iglesia está tratando, ningún otro sector, sin embargo, Puebla mantiene un alto índice de catolicidad (…) sin estar en las regiones más religiosas Puebla anda en el 90 por ciento de catolicidad, nos han colocado entre el 80, 86, 88, 90 y hasta 93 por ciento, quiere decir que sigue siendo una iglesia viva, en misión permanente”, indicó.
Con motivo de sus 10 años como arzobispo, Sánchez Espinosa resaltó que los principales retos de la iglesia son la familia, la formación de agentes de pastoral, el fomento de vocaciones y acercar a los jóvenes; en tanto, los logros son el incremento del trabajo social en la comunidad y el envió de casi 45 sacerdotes al extranjero para hacer una especialidad.
“El objetivo sigue siendo el mismo, ser un arzobispo cercano a las comunidades, cercano a los agentes de pastoral, a los sacerdotes, a las religiosas, los laicos y como pide el Papa, una iglesia en salida, salir al encuentro de las familias, esa es la preocupación, el deseo y los retos siguen siendo los mismos, la familia, la formación de agentes de pastoral, las vocaciones y los jóvenes”, dijo.
Víctor Sánchez Espinosa resaltó que en el caso de los jóvenes es una misión permanente, y llega un momento en el que se alejan de la iglesia, pero en algún momento vuelven y se convierten en adeptos de la religión, ahora, el Seminario Palafoxiano cuenta con 300 personas que formarán una nueva generación de sacerdotes.
En general, expuso, los sacerdotes tienen una alta vocación y compromiso con sus comunidades, pese a la complejidad de las zonas donde se les envía lo hacen con disponibilidad y gusto. A los sacerdotes más serenos, reflexivos y que promueven la unidad, se les manda a las comunidades con mayor conflicto.
El abuso sexual no sólo se da en la iglesia
Para el arzobispo de Puebla, la pederastia, el abuso sexual contra menores, no debería ser un tema por el que sólo se señale a la iglesia, ya que se presenta con mayor frecuencia en otros sectores e incluso en seno familiar.
“Se habla de que de 10 personas abusadas 8 son en la familia, en el tema familiar se tiene que trabajar mucho y en otros sectores, la iglesia ha tenido experiencias tristes, casos lamentables, ha pedido perdón, y que se denuncie, pero es la única institución que ha tomado el toro por los cuernos”, sentenció.
Asimismo, mencionó que ha hecho el llamado a las comunidades para que en caso de registrarse abusos se denuncien de manera oportuna ante la autoridad civil y el tribunal eclesiástico, ya que los sacerdotes también están en condiciones de defenderse en caso que no se les compruebe.
“Por otro lado hay una cantidad grande de sacerdotes buenos y entregados que están dando la vida en sus comunidades, el Papa dice que los sacerdotes somos como los aviones, son alrededor de 18 mil aviones que andan en el aire y no son noticia, pero se cae uno y son noticia, entonces es nuestro caso, la inmensa mayoría entregado a las comunidades, no es noticia”, dijo.
En torno a la actual coyuntura social, también resaltó que la iglesia católica difícilmente cambiará de opinión respecto al matrimonio igualitario y el aborto, ya que en un caso la familia es lo más importante para la institución y ésta se compone de papá, mamá e hijos; respecto a la interrupción del embarazo siempre va a preservarse la vida humana.
En tanto, descartó que la iglesia tome partido en la actual elección, únicamente exhortará a los ciudadanos a emitir su voto como mecanismo de participación y a los candidatos a hacer una campaña de propuestas, ya que la iglesia interviene en la vida política a través de sus laicos.
Cuando sea emérito regresaré con mi familia
Consciente de que a los 75 años debe renunciar a su responsabilidad como arzobispo y está a seis años de cumplir esa edad, Víctor Sánchez Espinosa manifestó que seguirá visitando las comunidades y haciendo trabajo comunitario en Puebla.
“Tengo exactamente seis años para pensar qué voy a ser cuando sea emérito, pero seguiré sirviendo a las comunidades, ya sin una responsabilidad de ser una cabeza y responder por lo que pasa en la arquidiócesis, pero sí ejercer mi ministerio episcopal (…) nos alejamos de la familia y cuando sea emérito quiero tener más cercanía”, expresó.
Sánchez Espinosa aseguró que en estos 10 años se ha dedicado a visitar todos los rincones de Puebla y las comunidades, desde las más pequeñas hasta las más grandes, con ello se identifica con la frase católica “apacienta a mis ovejas”, como una misión.