Los trabajadores sindicalizados despedidos del Ayuntamiento de Puebla dieron una tregua a la alcaldesa Claudia Rivera Vivanco para que la siguiente semana inicie su reinstalación, por lo que el plantón se movió de las puertas del Palacio Municipal a la plancha del Zócalo capitalino.
El vocero de 27 sindicalizados, Antonio Ramírez, dijo que la alcaldesa ha mostrado disposición para solucionar su situación laboral, pero amagó con regresar con más colaborares para plantarse en los pasillos del inmueble central si no se resuelve el problema que afecta la economía de muchas familias.
Señaló que su despido se debió a una persecución política iniciada por Gonzalo Juárez Méndez, líder del Sindicato de Trabajadores Benito Juárez, impuesto por el PAN, por ser oposición a su liderazgo, por lo que la huelga hubiera estallado con cualquier presidente que asumiera la actual administración del Ayuntamiento capitalino.
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El pasado 10 de enero, la presidenta municipal de Puebla se reunió con los inconformes de los despidos que se suscitaron en la administración de Luis Banck, quien quedó al frente del Ayuntamiento de Puebla cuando Antonio Gali compitió y ganó para ser el gobernador de un año ocho meses, y pidió a la Secretaría de Gobernación que atendiera caso por caso.
A través de un video que difundió en su cuenta personal de Twitter (@RiveraVivanco_), destacó que hubo un comentario que no le pareció correcto que provino de (Israel) Pacheco, quien dijo que con un tronido de dedos levantaba el plantón y que a él lo que le interesaba era su jubilación. Rivera aseguró que estará a favor de la libertad y el derecho de manifestación, pero siempre y cuando no afecte el derecho de otras personas a tener los servicios correspondientes, esto, porque las puertas del Palacio Municipal permanecieron cerradas.
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Fue el pasado 16 de octubre cuando 27 trabajadores sindicalizados del gobierno municipal se manifestaron con casas de campaña para pedir su reinstalación. Han pasado tres meses sin que se llegue a un acuerdo.
Sin embargo, ayer, como una tregua a la alcaldesa, los despedidos se retiraron de las puertas del palacio y pasaron su manifestación, con casas de campaña, a la plancha del zócalo de Puebla.
“No se trata de que nos vean como una oposición al gobierno de Claudia Rivera Vivanco, somos amigos, que si ella nos permite iremos de la mano, pero de aquí dependen familias, depende bienestar, salud, apelamos a su buena voluntad. Llevamos días sin solución”, expuso el representante de los trabajadores afectados.
