El gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta espera que al llegar la administración del panista Eduardo Rivera Pérez al Ayuntamiento de Puebla se haga una renovación completa de la policía municipal y que termine con la “hermandad” que existe en la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC).
“Espero que la nueva administración que llegue limpie la policía municipal, la limpie completamente, termine con la hermandad, esa que está ahí, controlando la actividad de los policías y vinculándolos a hechos ilícitos y a personas que delinquen (…) las policías hay que estarlas renovando permanentemente del abuso policial y de las vinculaciones de todo”, opinó.
En conferencia de prensa virtual, el mandatario dijo que en los últimos tres años nunca existió coordinación en materia de seguridad pública entre su gobierno y el de la edil Claudia Rivera Vivanco, aunque ella argumentó que sí había con la Guardia Nacional, así como SEDENA.
Por esta situación, Barbosa cree necesario hacer una limpieza en la policía, ya que considera que los elementos deben de tener proximidad y estrategias de vigilancia; pero, en su opinión, estos requerimientos nunca los cumplieron los elementos de la capital.
Incluso, dijo que muchos de los policías se creen “intocables” y por ello cometen actos irregulares, en este punto ejemplificó con un elemento que pidió 25 mil pesos a una pareja que se quedó a dormir en su coche porque su portón no abrió y tenían miedo de dejar su vehículo en la calle. A este policía ya lo están buscando para sancionarlo.
“Así se tiene que hacer, sino es solapamiento, la autoridad que tiene a su policía intocada es que la solapa y más bien ahorita hay que ver lo que viene, esperamos la renovación completa de la policía, yo espero eso, ya no me meteré con lo que hubo, ya pasó”, agregó.
En otro tema, el mandatario aprovechó para sugerirles a los alcaldes que no ganaron la relección y que están a meses de irse del gobierno municipal “que no suelten la lucha contra el crimen”, pues cree que en los procesos de entrega-recepción hacen un relajamiento en este rubro.
“El repunte de delitos en la zona conurbada corresponde a la enorme cantidad de población que ahí reside, no solamente en la capital se ha dado, sino que los conurbados (…) las transiciones son relajamientos en el ejercicio de la autoridad y de esto se aprovechan los grupos que infringen la ley”, comentó.
En su opinión la disciplina y la rigidez no debe de cambiar en torno a la disminución de los ilícitos pese a que habrá un cambio de autoridades.
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