Habitantes del municipio como Cuetzalan y localidades como San Miguel Tzinacapan se quejaron ante trabajadores de la Secretaría de Seguridad Pública sobre los constantes intentos de fraudes de los que son víctimas, vía telefónica. Esto, durante un curso de capacitación para la “Prevención del delito”, dado en las instalaciones de la Casa de la Mujer Indígena (CAMI) ubicada en la cabecera municipal.
En el lugar fueron expuestos distintos tópicos relacionados con la generación de los delitos de diferente índole, fue en donde mujeres que asistieron al curso se quejaron de los constantes intentos de fraude y que en muchas ocasiones se han consumado con la motivación a depósito de cantidades que van desde los cuatro, seis y hasta 20 mil pesos en cuentas que los mismos delincuentes les dictan desde los teléfonos móviles.
En sus experiencias, también contaron que en algunas ocasiones han logrado burlar las malas intenciones, porque confunden a los extorsionadores hablándoles en su lengua materna.
En la interacción con los capacitadores, también intervino el director del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) René Esteban Trinidad, quien aprovechó para mencionar que en el tema de las extorciones hay una organización denominada “Gubernatura Indígena”, de la que, algunos integrantes llegaron con habitantes de las comunidades de San Pablito y Zoyatla, del municipio de Pahuatlán, en donde les solicitaron 2 mil pesos a cada persona que asistió a una reunión, con la promesa de hacerles llegar recursos equivalente a 150 mil pesos que “correspondería a un proyecto productivo”, la gente les entregó el dinero pero lo prometido nunca llegó. La misma práctica, dijo, se reprodujo en otras comunidades, según se lo reportaron a INPI.
Se mencionaron otros casos de la misma organización, pero esta vez en el municipio de Tlaola, en donde se prometieron proyectos, pero de la misma manera que en Pahuatlán.
