ZAPOTITLÁN DE MÉNDEZ, Puebla.-El presidente zapotiteco, Emiliano Vázquez Bonilla, fue detenido por elementos de la policía municipal de Caxhuacan, el pasado 9 de agosto, por escandalizar en vía pública y alterar el orden y la paz social, según ventilaron en redes sociales y medios locales recientemente lo que desató toda clase de críticas contra el edil por parte de sus coterráneos.
Al parecer, fue detenido por el propio director de Seguridad Pública de aquel municipio, Gerardo Ávalos, que suele visitar luego de que agredió y, aparentemente, habría amenazado verbalmente a los uniformados, quienes habían atendido al llamado de vecinos por el escándalo que estaba armando; fue trasladado a la comandancia donde, poco después, salió. Al momento de la redacción de la nota, el ayuntamiento de Zapotitlán de Méndez no había emitido un comunicado oficial al respecto o fijado postura.
No es el primer escándalo que Vázquez Bonilla enfrenta, reseñas periodísticas dan cuenta de que, en junio pasado, organizaciones como “Pueblo en lucha”, lo acusaron de desvío de recursos del Ayuntamiento para su beneficio personal, aparentemente por la compra de caballos, vehículos y hasta la remodelación de su casa, así como otros bienes que no corresponden con sus ingresos.
En marzo del año pasado, según dio cuenta esta casa editorial, habitantes de la junta auxiliar de Nanacatlán protagonizaron un plantón de más de 20 días, en el que permaneció cerrado el palacio auxiliar, luego del desacuerdo generalizado que provocó el polémico alcalde por imponer a su candidato; lo acusaban de haber amenazado y terminó “reventando” la elección ante el riesgo de que no ganara el candidato que él quería.
En septiembre del año 2015, bajó el título de candidato a la presidencia municipal, acusó elementos de la policía vial del Estado por presunta extorsión.
