Más de 380 mujeres originarias de Santa María Coapan fueron parte de la tradicional Carrera de la Tortilla, que como cada año se celebraba en esta junta auxiliar, pero los dos años previos estuvo suspendida por la pandemia de Covid-19.
Durante el evento, el cual se llevó a cabo este domingo, las mujeres participantes pidieron mantener la tradición, la identidad de un pueblo indígena y, sobre todo, el respeto a las “coapeñitas”, estas mujeres que a diario continúan su labor de producir tortillas y las venden en calles de la ciudad de Tehuacán.
“Me cortarán las ramas, me cortarán el tronco, pero jamás me cortarán mis raíces”, fueron las palabras de Gudelia Alvino Méndez, ante de que iniciara esta competencia. La mujer dijo que este recorrido mantiene vigente la tradición que durante 28 años se ha llevado a cabo en Tehuacán, la cual da una proyección importante a la junta auxiliar.
Para estas mujeres, no solo se trató de una carrera más, pues señalaron que esto también es una oportunidad para dar a conocer los problemas que viven las mujeres que todos los días recorren la ciudad y municipios aledaños, llevando sus productos para vender.
Reina de la Tortilla pide respeto a su labor
Carmen Cesario Dolores, quien este año fue coronada como la Reina de la Tortilla, pidió no discriminarlas y que las respeten.
A esta petición, también se sumó el presidente auxiliar, Antonio Dolores Ignacio, quien tras reconocerles su labor a las “coapeñitas”, públicamente pidió al alcalde Pedro Tepole les permita seguir vendiendo en las calles de la ciudad y que les ofrezca un espacio digno, con el fin de que se siga manteniendo la cultura y la tradición de Santa María Coapan.
“Coapan merece respeto, Coapan merece Cariño, porque Coapan es un pueblo de hombres y mujeres trabajadores. Discúlpeme presidente, pero quiero que se comprometa a que les dará el apoyo a mis paisanas”, fueron las palabras del subalterno, quien aprovechó la presencia de las autoridades municipales para tocar el tema de las “coapeñitas” que el gobierno de Pedro Tepole pretende retirar del centro de la ciudad.
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Por su parte, Reina Dolores Natividad y Domitila Natividad Savino, madre e hija de edad adulta que también fueron partícipes de esta competencia, señalaron que lamentablemente sólo hoy les reconocen su labor, puesto que, durante el resto del año, tanto ellas como sus compañeras sufren por encontrar espacios para vender sus productos en la ciudad, en los mercados y en los municipios, por lo que consideraron que su labor debe ser más reconocida por las autoridades.
Tanto autoridades como participantes, expresaron con gusto su alegría de que se volviera a dar esta competencia y señalaron que las tradiciones y costumbres de este pueblo deben trascender las fronteras, ya que hasta ahora solo se ostenta este evento como Patrimonio Municipal.