Izúcar de Matamoros, Pue. Pese a la llegada de turistas de la capital poblana y de distintos municipios a la región de Izúcar de Matamoros, por temporada de Semana Santa, principalmente en Sábado de Gloria, el gobierno municipal precedió a cerrar y supervisar los balnearios, albercas y ojos de agua, con el objetivo de evitar el rebrote de Covid-19.
Y es que durante este fin de semana, se observaron a distintos turistas que arribaron a la región, algunos realizaron paradas en diferentes puntos, para comprar comida empaquetada, mientras que otros tantos, artículos referentes a la temática de día de campo, trajes de baño y salvavidas, sin embargo, al llegar a su destino se dieron cuenta que los centros acuáticos y parques recreativos permanecieron cerrados y tuvieron que retornar.
Cabe mencionar, que Izúcar de Matamoros cuenta con al menos dos ojos de aguas, atractivos naturales más visitados en esta época, es decir el Ojo de Agua de Santa María Xuchapa, y el Ojo de Agua de San Lucas Colucán, y dos balnearios privados, razón por lo cual estos al igual que los ojos de agua fueron cerrados.
Por su parte, Sergio Valero, regidor de Gobernación indicó que estas medidas fueron tomadas para evitar que en la región haya una tercera ola de contagios a consecuencia de la pandemia, por lo que el gobierno municipal en turno, busca estrategias para los tiempos en los que vivimos y pidió compresión a todos aquellos que visitaron el municipio como cada año.
“A través de las Direcciones de Protección Civil y Seguridad Publica, llevan a cabo recorridos de supervisión con el objetivo de hacer cumplir decretos y disposiciones en balnearios, albercas y ojos de agua, ante el posible rebrote y llegada de la tercera ola del virus, es responsabilidad de todos cuidarnos” señaló.
Asimismo, el gobierno municipal de Tlapanalá informó que, desde el año pasado, el balneario “Ojo del Carbón”, permanece cerrado hasta este fin de semana, por lo anterior, cientos de poblanos que pensaban que podrían acudir a estos lugares de esparcimiento durante este sábado y domingo atípicos, regresaron a casa desolados.