Pese a que la comuna de Chiconcuautla anunció la suspensión de entrega de programas oficiales, en sus redes sociales, vecinos de la comunidad de Toxtla, acusaron que se siguen entregando, cobijas, colchonetas, despensas y hasta fertilizante, sólo que se las autoridades municipales piden credencial de elector y se beneficia a los “allegados del munícipe Artemio Hernández Garrido candidato de PRI a reelegirse”.
Fueron habitantes de las comunidades de las comunidades de Toxtla y Tlaxco quienes se quejaron ante este medio de comunicación sobre que, se han percatado que, por la noche, “especialmente a la media noche o un poco después” cuando funcionarios del ayuntamiento de Chiconcuautla se encargan de hacer la repartición de dádivas con fines electorales.
Este medio quiso tener la versión del inspector Baudelio Aldana Simón, sólo que no estaba en la presidencia auxiliar, edificio oficial que luce con maleza, dado que no ha sido ocupado por la autoridad comunera desde que inició su gestión, “despacha de una bodega particular”, en donde hay publicidad del PRI y guardan acciones de programas oficiales.
Los vecinos indicaron que en sus medios oficiales (redes) publicó el último día de marzo de este año que, “El Gobierno Municipal de Chiconcuautla, apegado a los lineamientos que establece el Instituto Estatal del Estado de #Puebla, así como la Secretaría de Bienestar, comparte a la población en general, la SUSPENCIÓN TEMPORAL DE PROGRAMAS DE APOYO SOCIAL, debido al inicio del proceso electoral que se llevará a cabo en todo el estado”.
En cambio, en la realidad los programas se siguen entregando, incluso con la exigencia de la credencial de elector y se entregan a las personas allegadas y “líderes (operadores electorales) en las comunidades”.
Indicaron que, por las actitudes, decidieron interceptar los camiones torton cargados de fertilizante y entregarlo a la gente más necesitada. Contaron que no fue fácil, pues los camiones eran custodiados y guiados por el mismo inspector de Toxtla, de nombre Baudelio Aldana Simón, quien junto con su hermano y demás acompañantes trataron de evitar que los campesinos se apoderaran de la carga, pero ante la resistencia de la comunidad, “ya no pidieron”.
Precisaron que los hechos ocurrieron el pasado 20 de abril y que fue una acción provocada por el presidente municipal Artemio Hernández Garrido, quien busca reelegirse en el cargo por el PRI, pero en los casi tres años de su gobierno, sólo pavimentó unos 200 metros en uno de los accesos.
“Muchos de la comunidad no tienen agua entubada, no hay un sistema de drenaje que sirva y lo poco que llega es para hacer negocio, porque le interesa hacer techos, como lo que hizo en la secundaria, pero lo que beneficia a más gente en su servicio, no lo hace”, reclamaron.