En sesión del Consejo General del Instituto Electoral del Estado de este domingo, los integrantes se pronunciaron por una falta de información para poder determinar a un ganador de la presidencia municipal en Chiconcuautla; sin embargo, por la tarde del mismo 13 de junio, el presidente municipal con licencia y abanderado del PRI-PRD, Artemio Hernández Garrido, en sus redes sociales anunció que le había sido entregada la constancia de mayoría.
En horas previas, el Consejo General anunció en una sesión del pleno que en el caso electoral del municipio de Chiconcuautla, como el de otros lugares, los paquetes electorales habían sido siniestrados, al igual que el inmueble del Consejo Electoral Municipal, por lo que no había suficientes elementos para determinar a un ganador.
En cambio, a propios y extraños, sorprendió que ese mismo día, por la tarde-noche, quien fungió como candidato de Partido Revolucionario Institucional (PRI) en alianza con el PRD, y presidente municipal con licencia, Artemio Hernández Garrido, publicó una imagen con un documento en las manos que, dijo que era la constancia de mayoría.
Lugareños como en vecinos de los pueblos aledaños, resultó sorprendente por el conflicto postelectoral y la incertidumbre que hubo unas horas antes, debido a la violencia manifestada en actos por inconformidad en la manera en que se desarrolló el proceso electoral y especialmente la jornada.
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En sesión del Consejo General Electoral del Instituto Electoral del Estado se había determinado que se realizaría una elección extraordinaria, debido a que se siniestraron documentos y/o inmuebles del Consejo Municipal Electoral, por lo que se desaparecieron las evidencias que ayudaran a definir un candidato o candidata ganadora.
Versiones de cinco de siete abanderados de distintos partidos políticos, señalaron que en 11 casillas de 20 que se instalaron, se quemaron los paquetes electorales por parte de ciudadanos del municipio que se manifestaron inconformes por las “actitudes del presidente municipal”, Artemio Hernández Garrido, quien era abanderado del PRI-PRD y pretendía reelegirse. Señalaron que fue en las comunidades de Zempoala, Toxtla, Quetzalingo, Tlaxco y la cabecera municipal de Chiconcuautla donde ocurrieron los hechos.
YA SE HABÍA ADVERTIDO
Quien fungió como candidato a la alcaldía por Nueva Alianza, Tomás Martínez Roldán, compartió que se informó a la Secretaría de Gobernación del Estado que había focos rojos en donde podría haber conflicto y se habló de Tlahuapan, San Lorenzo y Chiconcuautla, pero no se tomaron medidas de seguridad.
Fue después del cierre del escrutinio y cómputo de las casillas y en el traslado de los paquetes electorales, cuando fueron incendiados por pobladores en comunidades, así como en la sede del Consejo Municipal Electoral.
De la casa del presidente municipal y candidato, Artemio Hernández Garrido, aseguraron que salieron proyectiles de armas de fuego contra los manifestantes, pero no hubo heridos, pero la medida sirvió para disipar a los inconformes por unos momentos, aunque después llegaron al Consejo Municipal Electoral, ubicado a un costado de la casa del edil y quemaron los paquetes electorales.
Cinco de siete candidatos que participaron en la contienda por la presidencia de Chiconcuautla y que se muestran inconformes, exigieron el pasado 9 de junio a las autoridades electorales se convoque a elecciones extraordinarias y llamaron al gobernador del estado, Miguel Barbosa Huerta, para que gestione una fiscalización a los recursos públicos del municipio, dado que se habrían desviado para la coacción del voto por parte del candidato priista y presidente con licencia, que aspira a reelegirse.
Los abanderados de, Nueva Alianza, Tomás Martínez Roldán; del PT, Belém Soto Rojo; de MC, Miguel Domínguez Velázquez; del PSI, Martín Fuentes Teanguistengo; del PAN, Noé Garrido Hernández, fueron quienes se unieron para hacer la denuncia pública.
El abanderado del PSI, Martín Fuentes Teanguistengo, expresó que por la noche del 6 y la madrugada del 7 de junio, Artemio Hernández Garrido, estuvo ofreciendo dinero a algunos representantes de partidos distintos al PRI-PRD para que le entregaran sus actas de resultados de sus casillas para poder tener un argumento de su supuesto triunfo, pero no logró hacerlo.
Los consejeros generales electorales, indicaron que no cuentan con información de documentos y/o edificios que fueron siniestrados, como es el caso de Chiconcuautla.
