Debajo de una galera y prácticamente a la intemperie, es como permanecen estudiando los menores de la comunidad de San Lucas en el municipio de Hueytamalco, quienes, en días pasados, fueron desalojados del lugar que venían ocupando como su escuela, sin que hasta el momento alguna autoridad haya hecho presencia en el lugar para conocer la situación y emprender alguna acción que permita mitigar dichas condiciones de estudio.
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Fue a finales del mes de febrero cuando los menores, junto con sus padres, fueron sorprendidos por autoridades municipales, así como por representantes legales del dueño de la propiedad en la que se encuentra ubicada la escuela, quienes llevaron a cabo el desalojo del sitio, sacando mobiliario, materiales y todo lo contenido dentro de la escuela, incluyendo a los menores, quienes quedaron sin un lugar donde poder continuar con sus actividades escolares.
Según el propio testimonio de los padres, la escuela estuvo operando dentro de dicho predio durante cerca de 30 años, del cual tan solo contaban con un documento de donación, pero sin haber realizado la escrituración correspondiente, lo que derivó en el mencionado desalojo. Sin embargo, hasta el momento, no han recibido la visita de alguna autoridad que les ofrezca alguna alternativa de solución.
Ante esta situación, fue la maestra de la escuela quien dio a conocer que, mientras tanto, los 15 menores de preescolar y primaria fueron acomodados debajo de una galera donde reciben clases, pero están expuestos a las condiciones climáticas, sobre todo a las altas temperaturas que se registran en el municipio.
La maestra explicó que, al ser un espacio reducido para los niños, se han visto obligados a no tener recreo ni un lugar donde puedan jugar o realizar alguna otra actividad. "Y ahora mismo, solo tenemos una pequeña galera donde están todos los niños amontonados; realmente no tienen un espacio en el cual trabajar. Todos los niños de preescolar están trabajando en una sola mesa porque no tenemos más espacio".
La maestra también confirmó que, por parte de los padres de familia, ya enviaron un documento a la Secretaría de Gobernación para solicitar su apoyo y lograr la construcción de un espacio digno dentro de algún predio que pueda ser donado por la comunidad, con la intención de permitir que los niños continúen con su preparación.
Algunos de los menores, a través de videos, solicitaron al gobernador del estado su apoyo para lograr la construcción de esta nueva escuela, donde puedan continuar con su educación. "Le pedimos que nos pueda dar una escuela, porque la nuestra nos la embargaron y ahora tenemos que estudiar en una casa y no tenemos espacio".
Mientras tanto, padres de familia, maestras y menores continuarán aguardando una solución o apoyo por parte de las autoridades, sobre todo porque cerrar esta escuela implicaría que los niños tengan que viajar una hora y media diariamente para llegar a la escuela más cercana, ubicada en la localidad de Teteyahualco.
Reclaman donación
El caso fue dado a conocer inicialmente por la presidenta del comité de padres de familia, Estela Monfil Martínez, quien señaló que se trata de una escuela perteneciente al Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe), cuya donación fue realizada por el señor Lucio Vázquez Ortiz, con quien en su momento fue elaborado un documento de donación. Sin embargo, su hijo Mauricio Vázquez Lorenzo reclamó el predio desconociendo la donación.
Ante ello, narró que fue el pasado 29 de febrero cuando un grupo de personas, encabezadas por un diligenciario en compañía de algunos abogados, con la supuesta encomienda de desalojar la escuela, ingresaron rompiendo candados y puertas para comenzar con el retiro de mobiliario y materiales didácticos, los cuales fueron llevados a un domicilio particular.
Según dio a conocer la madre de familia, dentro del mismo predio también se encuentra el preescolar, el cual, de igual forma, fue desalojado. La estructura, al tratarse de una construcción de material, fue conservada, mientras que la primaria, al ser un aula improvisada, fue destruida en su totalidad. Argumentó que "no es justo, porque los niños se quedaron sin escuela".
Al respecto, abundó que habría sido el presunto dueño, Mauricio Vázquez Lorenzo, quien promovió la orden de desalojo, a pesar de la antigüedad con la que cuenta la institución en el terreno, solicitando por tanto la asesoría o intervención de alguna autoridad que les pueda ayudar a resolver el problema.
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